MUCHOS GOLES Y POLEMICA

Floja actuación del gremio arbitral en la jornada 26 de la liga que vuelve a encaramar al Real Madrid como líder de este curso con cinco puntos de ventaja sobre el Barcelona

Antonio Blanca

Había mucha tela que cortar, mucha radio que oír, televisión que ver, nalgas de acero que gastar en el sofá en la interesantísima tarde del pasado sábado, con reminiscencias a esas tardes de calor primaveral de mayo y junio de 2007 con las espadas en todo lo alto y el título en juego. El sábado era el liderato lo que se ponía en disputa, el Barcelona tras 10 meses sin oler el primer peldaño de la clasificación tenía la oportunidad de arrebatárselo al Madrid, que lo lleva disfrutando desde la primera jornada. A priori la jornada era favorable al equipo de Rijkaard, visitaba el Calderón con la cabeza de Aguirre en juego y parte de la afición colchonera de uñas con su presidente y el Real de Schuster viajaba a Andalucía, Huelva, terreno maldito esta temporada para los merengues. Pero el destino esta vez quiso devolver las mieles al Atléti y a Robinho y dejar al Barça sumido de nuevo en una búsqueda identitaria para reencontrarse con ese fútbol que poseyó hace dos temporadas, ya muy lejanas, y que ahora muestra sólo por fases en una remezcla de pasión, apatía, desorden, en definitiva anarquía pura, que no vale sino para volver a perder distancia con el líder después de haber logrado lo más difícil reducir una amplia ventaja, pero esto es lo que tiene la liga, el campeonato de la regularidad, hacer la goma puede suponer una gran recuperación y meterse arriba en la cabeza de carrera o la pájara definitiva, y ver como el Madrid demarra para escaparse. A todas cuentas, como el burro de “Shrek” diría, ¿falta mucho? Pues sí, aún queda un poco.

Cuatro partidos ponían de largo el primer día de marzo. En Coruña el Deportivo de Lotina consiguió una vital victoria, remontando a un rival complicado, el Sevilla de Jiménez que venía enrachado y que vio como con el 2-1 los puesto Champions se ponen a cinco puntos. Respira Lotina que logra tras muchas jornadas en el foso del abismo salir a flote y dejar aunque por una semana sea la caída a la BBVA. Los andaluces estuvieron más pendientes del partido de mañana que de intentar amarrar la victoria liguera.

Un nombre. Un hombre. Un jugador. Un símbolo. Un nuevo crack. “Kun”, “Kun”, “Kun”, Agüero. Sergio Agüero. ¡Qué jugador! Lo dije, el ‘10’ del Atlético no tenía nada que envidiar a Messi y desde luego no tiene nada que envidiar ahora. Él y sólo él tiró de los rojiblancos frente al Barcelona en un partido que se le puso cuesta arriba a los de Aguirre (pensaba que tenía las horas contadas en el banquillo del Manzanares), cuando Ronaldinho dibujó en el aire una genial acrobacia, elasticidad pura y dura, y marcó un soberano gol de chilena. Ahí fue cuando el “Kun” apareció y el sólo fue superhéroe, sin necesidad de 4 fantásticos, se merendó al Barcelona de Rijkaard (cada vez gestiona peor los partidos y las sustituciones son más desacertadas), dos goles (el cuarto fue una obra de arte, donde Milito y Puyol besaron el verde del Calderón y buscaron cintura nueva), una asistencia y un penalti provocado. ¿Qué más se le puede pedir a “MVP” Agüero? El marcador reflejó un 4-2 final, en un partido Atlético-Barcelona chapado a la antigua, que vale para que Javier Aguirre tome aire fresco, para que el Barcelona vuelva a sembrarse de dudas, Henry y Ronaldinho andan con un bajísimo estado de forma y para encumbrar de forma definitiva, a un ’10’, el del Atlético, el de Argentina, un genio de lámpara, llegado de la “pampa”, de Buenos Aires, Independiente, y que tiene nombre de estrella, es un superhéroe, ha conseguido que el Atléti viva en Champions.

Polémica en el Nuevo Colombino. Iturralde protagonista, acompañado por el incombustible “Rafa” Guerrero. 2-3 final favorable al Real Madrid en su visita a Huelva. El “Recre” se sitúa antepenúltimo en puestos de descenso, y eso que pudo ganarle al Madrid, lo tuvo a su merced durante la primera media hora de partido, pero…lo dejó escapar. Raúl empató en un claro fuera de juego, gol que no debió subir al marcador y que debiera haber supuesto la primera expulsión de la noche, por un brutal puñetazo de Sorrentino al capitán blanco. Con el empate a uno de forma injusta para el Madrid, mucho premio para lo desplegado en el campo, el partido se puso duro y violento. Beto pagó con roja excesiva una pseudo agresión al “actorzuelo” Heinze, ¡qué falta de profesionalidad! Basta ya de tramposos. Pero como Iturralde tenía cargo de conciencia por la expulsión de Beto, buscó la mínima oportunidad para compensar y al igual de forma injusta expulsó a Ramos. Ley de compensación de un árbitro zoquete donde los haya. En estas saltó Robinho al campo, y menuda exhibición que tributó. Dos goles en quince minutos, el tercero de la noche fue genial, tanto por el regate como por la pared tirada con Gago y la definición batiendo con una suave vaselina al cancerbero onubense; y de nuevo tierra de por medio entre el Madrid y el Barça. Cinco puntos gracias a Robinho, que ya calienta motores pensando en la Roma. La expulsión merecida de la noche por una criminal entrada de juzgado de guardia la de Quique Álvarez a Robben. El holandés tendrá como mínimo un mes sin pisar un terreno de juego, sufre rotura parcial del ligamento, las gracias se las den al carnicero del Recreativo, para que luego el señor Mendoza se queje, tras lo que después del partido en rueda de prensa tenían orquestado a Schuster, una trampa para el técnico alemán en la que éste no cayó, hecho que enervó aún más a los aficionados y periodistas locales. Una pena. Prepotente Schuster en absoluto, sólo fue coherente y no dijo una palabra más alta que otra. Esta vez el alemán si obró bien.

El Espanyol cortó la racha del Valencia y se reencontró con la victoria. 2-0 en un flojo partido de los chés y ahora a pensar que la clasificación europea está mejor custodiada. El dato negativo para los blanquiazules, la lesión de De la Peña que no podrá visitar el Bernabéu.

Goleada, gozo y disfrute en el Ruiz de Lopera. 4-0 del Betis al Murcia. Los sevillanos dejan el descenso algo más alejado y el Murcia se empieza a ahogar inexorablemente. Su entrenador Alcaraz tiene pie y medio fuera y la salvación se antoja complicada si no se pone remedio de carácter urgente.

Partidazo en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe. 3-1 de ventaja tuvo el Getafe que en los últimos 13 minutos perdió, pare terminar regalando dos puntos al Mallorca, empate a tres final, que jugó toda la segunda parte con un hombre menos por la expulsión de Scaloni. No supieron finiquitar los pupilos de Laudrup un partido que merecieron ganar pero que terminaron con cara de no saber que había ocurrido y un solo punto en el casillero.

Prosigue en su sueño europeo el Racing de Santader, que venció 0-1 al Valladolid con un gol churro de Duscher, cuya parábola se hizo inalcanzable para el meta vallisoletano. Los de Marcelino viven tiempos de vino y rosas, sextos en la tabla con ventaja de dos puntos sobre el séptimo.

Sorpresón en el Ciudad de Valencia. 2-1 ganó el Levante al Zaragoza. Los locales quieren mantener la esperanza de una salvación utópica a base de coraje y garra y los maños empiezan a olvidarse de Europa para mirar al descenso, no en vano los de Irureta están empatados a puntos con el Recreativo. Víctor en su casa de chiste.

Empate sin goles en El Madrigal entre Villarreal y Osasuna en un choque en el que brillaron los porteros y naufragaron los atacantes que no dieron una y se mostraron poco certeros.

Se acababa la vigésimo sexta jornada en Almería y hubo reparto de puntos. 1-1 goles de Negredo y Llorente y todo igual para los andaluces y los vascos. Los primeros viven tranquilos, los de Caparrós con la inseguridad de oír el susurro de la BBVA.