La Premier League se pone a la cabeza de las grandes ligas europeas de fútbol como así lo demuestran las grandes fortunas propietarias de los clubes ingleses
Antonio Blanca
Se podía adivinar desde hace dos o tres temporadas acá. El fútbol de las islas británicas, a nivel de clubes, porque su selección está inmersa en una grave crisis de identidad, se le ha encomendado la difícil tarea de hacerla resurgir a Capello, hecho que demuestra que aún deben encontrarse en el terreno de juego y en el alma del vestuario, ha superado a la liga de las estrellas española y al “calcio” italiano, que durante la década de los noventa y principios de este nuevo siglo XXI, se repartieron el privilegio de ostentar la vara de mando del fútbol.
Pero el báculo del poder ha cambiado de manos, ha cruzado el estrecho “Paso de Calais” y se ha entronizado en el país del té a las cinco de la tarde, y del fútbol a mediodía, Inglaterra con su “Premier League”. Una liga a día de hoy maravillosa y con un potencial que asusta, tanto de expansión a nivel del mundo en la materia de marketing y merchandaising, como en el ámbito deportivo. Hace años, las grandes estrellas se iban a Italia, el lustro pasado hasta 6 balones de oro pasaron por España, pero ahora, el “football” baila al son del Reino Unido. Sólo hay que mirar a la pasada final de Champions League, Chelsea ante Manchester United para comprender que el relevo toca, y a nuestro futbol le llegó la pasada campaña.
Grandes imperios cayeron, pero este del fútbol británico no tiene visos de caer próximamente, todo lo contrario, se están sentando las bases para constituir una liga fortísima, que va por delante no sólo de sus competidoras, sino de la mismísima FIFA. Son los primeros en aplicar las nuevas tecnologías al fútbol (nada tiene que ver el arbitraje de allí con el funesto de aquí), fueron los primeros en instaurar un gran “Pay per view” (pago por visión), mientras en España e Italia la televisión no sabe que hacer para hacer rentable el deporte más seguido en ambos territorios si no es pegándole un brutal sablazo al bolsillo de su cliente, no es de recibo que un partido cueste 12 €. Los ingleses buscan como ampliar mercado, Asia es completamente suya, y sólo Florentino Pérez y su Real Madrid fueron capaces de poner en jaque el poderío de la Premier en el lejano Oriente, tal vez Florentino supo aplicar los dogmas del fútbol británico al español y le fue genial, hasta que cayó en la vanidad latina de creerse sabio y ser superior, inventor del fútbol a lo sumo, y caer en debacle deportiva calamitosa, teniendo que abandonar un barco perfectamente diseñado para lucir durante mucho tiempo. Y ahora, también les ganan los clubes ingleses la partida a los españoles en el tema económico.
Los dos grandes de nuestro fútbol, Real Madrid y Barcelona, no son sociedades anónimas, no cotizan en bolsa, no funcionan como una empresa al uso. Sin embargo, todos los clubes ingleses son sociedades anónimas, cuyos dueños, caso de Manchester United, Chelsea, Manchester City (el más reciente) son millonarios o multimillonarios que tienen un equipo de fútbol como el que tiene una videoconsola, como un mero “hobbie”. Con este precedente, y ante la crisis económica mundial en la que estamos inmersos, es lógico observar como el fútbol español se ha gastado la mitad de lo que lo ha hecho el inglés, que ha derrochado euros como ninguno. Los grandes jugadores ahora emigran hacia allí, vienen y se llevan a nuestras promesas, y lo más peligroso de todo, es que es una liga magnífica, que se vende de gran manera, con lo cual, a muchos aficionados no les importa que el peso del fútbol mundial se haya trasladado hasta allí. A mí no me duelen prendas en reconocer que nos han ganado la batalla, pero es que mirando la clase dominante del fútbol patrio, Villar, Calderón, Laporta, del Nido, uno se explica el cómo y el por qué.
¡God save the Premier!
Pero el báculo del poder ha cambiado de manos, ha cruzado el estrecho “Paso de Calais” y se ha entronizado en el país del té a las cinco de la tarde, y del fútbol a mediodía, Inglaterra con su “Premier League”. Una liga a día de hoy maravillosa y con un potencial que asusta, tanto de expansión a nivel del mundo en la materia de marketing y merchandaising, como en el ámbito deportivo. Hace años, las grandes estrellas se iban a Italia, el lustro pasado hasta 6 balones de oro pasaron por España, pero ahora, el “football” baila al son del Reino Unido. Sólo hay que mirar a la pasada final de Champions League, Chelsea ante Manchester United para comprender que el relevo toca, y a nuestro futbol le llegó la pasada campaña.
Grandes imperios cayeron, pero este del fútbol británico no tiene visos de caer próximamente, todo lo contrario, se están sentando las bases para constituir una liga fortísima, que va por delante no sólo de sus competidoras, sino de la mismísima FIFA. Son los primeros en aplicar las nuevas tecnologías al fútbol (nada tiene que ver el arbitraje de allí con el funesto de aquí), fueron los primeros en instaurar un gran “Pay per view” (pago por visión), mientras en España e Italia la televisión no sabe que hacer para hacer rentable el deporte más seguido en ambos territorios si no es pegándole un brutal sablazo al bolsillo de su cliente, no es de recibo que un partido cueste 12 €. Los ingleses buscan como ampliar mercado, Asia es completamente suya, y sólo Florentino Pérez y su Real Madrid fueron capaces de poner en jaque el poderío de la Premier en el lejano Oriente, tal vez Florentino supo aplicar los dogmas del fútbol británico al español y le fue genial, hasta que cayó en la vanidad latina de creerse sabio y ser superior, inventor del fútbol a lo sumo, y caer en debacle deportiva calamitosa, teniendo que abandonar un barco perfectamente diseñado para lucir durante mucho tiempo. Y ahora, también les ganan los clubes ingleses la partida a los españoles en el tema económico.
Los dos grandes de nuestro fútbol, Real Madrid y Barcelona, no son sociedades anónimas, no cotizan en bolsa, no funcionan como una empresa al uso. Sin embargo, todos los clubes ingleses son sociedades anónimas, cuyos dueños, caso de Manchester United, Chelsea, Manchester City (el más reciente) son millonarios o multimillonarios que tienen un equipo de fútbol como el que tiene una videoconsola, como un mero “hobbie”. Con este precedente, y ante la crisis económica mundial en la que estamos inmersos, es lógico observar como el fútbol español se ha gastado la mitad de lo que lo ha hecho el inglés, que ha derrochado euros como ninguno. Los grandes jugadores ahora emigran hacia allí, vienen y se llevan a nuestras promesas, y lo más peligroso de todo, es que es una liga magnífica, que se vende de gran manera, con lo cual, a muchos aficionados no les importa que el peso del fútbol mundial se haya trasladado hasta allí. A mí no me duelen prendas en reconocer que nos han ganado la batalla, pero es que mirando la clase dominante del fútbol patrio, Villar, Calderón, Laporta, del Nido, uno se explica el cómo y el por qué.
¡God save the Premier!
6 comentarios:
Estos temas aburren Antonio, da caña a quien le tienes q dar caña y dejate de observaciones de estas
A mí si me gustan estos post, es bueno q se le de seriedad de vez en cuando
Yo no creo q sean de futbol, son de tonterias, hablad de futbol
En efecto y como Benitez ha dicho es la Premier mejor q la liga, por eso todos los millonetis estos se van alli. A nosotros se nos paso el arroz
lo k si es verda es k los dirijente de alli son mejore q los daki
A la Premier ya no la pillamos ni de coña, se nos ha escapado, xq saben hacer las cosas muy bien y con cabeza, y ahora se nos ve el plumero. Banítez lleva toda la razon en decir q la liga inglesa es mejor q la española
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