lunes, 11 de noviembre de 2013

SIN MESSI SÍ HAY PARAÍSO



La estrella argentina del Barcelona cayó lesionado en Sevilla en la goleada de su equipo al Betis y con el pinchazo del Atlético los culés se quedan en solitario al frente de la clasificación

Antonio Blanca

La Messidependencia del Barcelona ha desaparecido. El argentino no está a la altura que se esperaba de él esta campaña y sin embargo su equipo está rindiendo a un gran nivel, con una pegada que parecía haber perdido hace unos años y que con el “Tata” Martino ha recuperado en la presente edición de la Liga BBVA, competición que dominan con autoridad tras trece encuentros, habiendo cedido tan solo dos puntos, un empate en el difícil campo del Reyno de Navarra. No está Messi, pero se le sigue esperando, las lesiones que comenzaron la temporada pasada son tónica habitual ahora para la estrella culé. Sus compañeros empezando por un colosal Víctor Valdés en la portería se encargan de hacer más leve su ausencia presente. Alexis, Cesc, Pedro y Neymar son los principales protagonistas, por el contrario llama sobremanera la atención las múltiples suplencias de Iniesta que tampoco atraviesa su mejor momento. Con el Atlético de Madrid a tres puntos y el Real Madrid a seis, el Barcelona empieza a imponer su autoridad y un nuevo demarraje puede dejarle muy de cara el título liguero.

El Granada  logró su segunda victoria consecutiva (en viernes) y se sitúa ente entre los ocho primeros de la clasificación al superar por 3-1, con triplete de El Arabi, a un flojo Málaga que ofreció una pobre imagen en el Nuevo Los Cármenes. Schuster empieza a caminar por el alambre. Caballero volvió a salvar a los suyos en la primera parte, pero nada pudo hacer en la segunda parte ante el acierto del inspirado delantero marroquí.

También en la noche del viernes, el Almería se llevó los tres puntos del estadio del Reyno de Navarra y sumó su tercera victoria consecutiva, a costa de Osasuna (0-1), que le hace salir de los puestos de descenso. El gol lo marcó Rodri en el minuto 17 de partido, en una jugada en la que estuvo muy rápido al aprovechar un fallo del portero Andrés Fernández (suena para el Real Madrid la próxima temporada). Osasuna dominó el juego, pero su falta de acierto y el gran partido del portero Esteban echaron por tierra sus ilusiones. El equipo navarro vuelve a la zona de descenso y la derrota frena en seco la buena reacción que tuvo tras la llegada de Javi Gracia al banquillo.

La soleada tarde del sábado comenzó en el Santiago Bernabéu. El Real Madrid se impuesto a la Real Sociedad por un contundente 5-1 en un partido en el que Cristiano Ronaldo sumó tres goles más (ya lleva 19 en cuatro años) y en el que al equipo de Ancelotti le bastó medio partido para pasar por encima de la Real Sociedad. Con esta victoria, el Real Madrid suma 31 puntos y metía presión al Barça y al Atlético de Madrid  en sus encuentros como visitantes. La Real, por su lado, ve frenada su buena racha de resultados en liga y cierra una aciaga semana en la que ha quedado prácticamente eliminada de la Champions y se ha llevado un severo correctivo del Bernabéu. Porque este ha sido, posiblemente junto con el del Málaga, unos primeros cuarenta y cinco minutos primorosos de excelencia futbolística del Madrid desde que llegó Carlo Ancelotti. Inmerso en la búsqueda de un fútbol completo y excelso, Ancelotti parece que ha dado con la tecla, parece es lo que digo porque que puede volver a ser otro oasis. Esta vez, el equipo blanco no consiguió solo el resultado, sino que llegó a él por la alfombra roja. El Madrid fue superior a la Real desde el minuto 1 hasta el 90. Por tierra y por aire. Un auténtico ciclón. Una de las claves del partido del sábado fue haber encontrado, al fin, un centro del campo de su gusto. Xabi Alonso (agua de mayo para el Real), Khedira y Modric se asientan como titulares y lo hacen cargando de razones al italiano. Por orden de rango, Xabi Alonso dio una auténtica exhibición. La enésima. Arrasate le puso a su tocayo Prieto encima para que evitara que el balón saliera con fluidez, pero el de Tolosa dio un clinic de salida de balón y de esos cambios de orientación en los que el balón hipnotiza al que sigue su trayectoria. Y Ronaldo, siempre Ronaldo. El portugués pasa por uno de los momentos más dulces de su carrera sino el que más y eso lo notan sus compañeros y rivales. Volvió a ser determinante y se consagra pese a quién le pese como el mejor jugador del mundo.

El Getafe empató a uno ante el Elche en un partido aburrido y repleto de imprecisiones que dejó un mal resultado para el conjunto de Luis García Plaza, que, pese a mantenerse en puestos europeos, está en una línea descendente tras sumar su tercer encuentro consecutivo sin conocer la victoria en el Coliseum Alfonso Pérez. Ambos equipos brindaron un encuentro apagado, aburrido en su mayor parte y con dos escuadras que mostraron una falta de ideas preocupante para los pocos espectadores que acudieron al estadio. Sobre todo en la primera parte. De ella se podría escribir un manual del anti fútbol, lo ramplón predominó los noventa minutos.

El Rayo Vallecano sorprendió al Celta de Vigo (0-2) en Balaídos, donde los celestes siguen sin ganar este curso, y sumó un valioso triunfo que le permite asomar la cabeza fuera de la  zona de descenso. El Rayo expuso en Balaídos su mejor repertorio. A pesar de su delicada posición en la clasificación, el equipo madrileño no renunció a su estilo en ningún momento. Paco Jémez ha inculcado en sus jugadores ese gusto por el fútbol de toque y el Celta se vio desbordado en el primer acto por su rival.

La heroica y los cambios de Ernesto Valverde, concretamente los dos jugadores de refresco que puso el técnico tras el descanso, Mikel Rico y Aduriz, propiciaron una nueva remontada del Athletic en San Mamés, esta vez ante el Levante, que se adelantó con un gol de David Barral en la primera mitad. Es la quinta vez en lo que va de temporada en la que los bilbaínos se ven por detrás en el marcador en el nuevo campo. Y, a pesar de ello, siguen invictos en su nueva, coqueta y ruidosa casa. La del pasado sábado ha sido la tercera ocasión en la que los rojiblancos completan la remontada (anteriormente hicieron lo mismo ante Celta y Betis). En las otras (frente a Valencia y Elche) el vuelco en el marcador solo le dio para empatar. Este triunfo permite al Athletic fortalecer la posición europea en la que se encuentra.

El ritmo del cuadro del “Tata” Martino comienza a ser infernal para el que aspire a discutir su predominio. Aunque sin el brillo continuado de otras temporadas es un diesel imparable. Trece partidos, doce victorias y un empate. Unos números que le hacen prácticamente irresistible. Eso que Messi se retiró del campo muy pronto otra vez por una nueva lesión muscular, en el bíceps de su pierna izquierda. No le importó al conjunto azulgrana. Se combinaron un par de intervenciones magníficas de Víctor Valdés para aplacar el ánimo del conjunto de Pepe Mel y una precisa combinación culminada por un pase de Cesc Fábregas al brasileño Neymar para someter a los verdiblancos. 1-4 final, demasiado castigo para un Betis que estaba cuajando un buen partido, que había llegado con peligro, pero se encontró con un enorme Víctor Valdés y un Barcelona letal en los últimos metros.
El Atlético de Diego Simeone, bajo su filosofía de 'partido a partido' quiere aguantar y resistir, pero no es tan infalible y aunque su labor es más que elogiable lo cierto es que ya está a tres puntos, distancia que no es grande pero sí sensible y que le obligan a no fallar para luchar con los barcelonistas. El Villarreal, donde ya 'pinchó' el Real Madrid, el conjunto de Marcelino García Toral ratificó su condición de revelación de la campaña y también frenó al Atlético, a la par que se mantiene en la zona de Liga de Campeones.
Aunque se adelantó pronto el cuadro madrileño con un autogol de Mario, el equipo villarrealense, que tiene la sensible baja por lesión del mexicano Giovani dos Santos, exhibió de nuevo todas las virtudes que le hacen estar arriba en la tabla y tuvo arrestos para poner en problemas a un equipo bien armado y poderoso como el Atlético hasta que firmó las tablas con un autogol de Juanfran Torres al intentar evitar el remate del nigeriano Ikechukwu Uche. El Villarreal queda ya a siete puntos del cuadro del italiano Carlo Ancelotti, con lo que la brecha está clara. La Liga, como la anterior edición, a estas alturas es ya cosa de tres y los demás deberán pelear por el resto de objetivos.

El Valencia no acaba de arrancar. Volvió a tropezar en casa, en este caso ante un Valladolid que fue superior pero que se tuvo que conformar con el 2-2 al no tener acierto para rematar un buen partido. Después de que el argentino Banega malograse un penalti, Javi Guerra y el colombiano Gilberto 'Alcatraz' García adelantaron en dos ocasiones al Valladolid. La intranquilidad y las protestas volvieron a la grada de Mestalla, cuyo equipo respondió sin buen juego pero con corazón y al menos le dio para salvar un punto gracias a los tantos del también colombiano Pabón y del franco-argelino Feghouli, pero no tuvo recursos para más.

Los valencianistas se quedan en un grupo a tres puntos de Europa que también integran Real Sociedad, Granada y Levante, y que precede a un Sevilla que resurgió y acabó con el maleficio lejos del Ramón Sánchez Pizjuán, ya que no ganaba como visitante en Liga desde hace más de un año. Tuvo que ser en Cornellá ante el Espanyol del mexicano Javier Aguirre, al que derrotó por 1-3 en un partido que encarrilaron muy pronto el argentino Fazio y Vitolo y que remató con un magnífico gol el colombiano Carlos Bacca. Era una prueba de fuego para el técnico Unai Emery, en situación complicada por este dubitativo inicio de temporada, y salvó el examen. La victoria tranquiliza notablemente la situación y dan confianza a un equipo necesitado de creer en sí mismo para luchar por los objetivos marcados.