lunes, 13 de abril de 2009

ENRACHADOS

Ni Barcelona ni tampoco Real Madrid fallan en su particular y desigual pelea por el cetro liguero y suman otra jornada más los tres puntos

Antonio Blanca

Quedan ya tan sólo ocho jornadas para que la liga 2009 escriba su último renglón, y en Barça y el Madrid prolongan su pulso por ver quien se hace con el título finalmente. Evidentemente los culés lo tienen todo en la mano para lograr vencer esta temporada, siguen manteniendo al Real a seis puntos, su fútbol-arte es elogiado por todos, los rivales o se atenazan y no les plantan cara, o cuando lo hacen se encuentran con tempraneros goles en contra y el arbitraje de turno favorable a los pupilos de Guardiola, esa manita del “trío calavera”, que esta temporada está menos activa, pero que cuando aparece, es cuando realmente siempre hace falta, barriendo para el mismo lado. El Real Madrid aburre, invita a la tan española siesta, al bostezo y al denuesto, pero sigue ganando, suma que te suma, entrecejo fruncido, en la cabeza la remontada, harto complicada, pero los de Juande Ramos quieren morir matando, y no arrojarán la toalla hasta el último suspiro, cuando ya la matemática no permita seguir creyendo en una más que cuasi imposible remontada. Por abajo, se aprieta bastante la lucha por eludir la caída a la Adelante, y en un pañuelo de cuatro de puntos se sitúan cinco equipos, quedando el Espanyol de Pochettino tocado y hundido, aún puede mantener la esperanza, pero la cera de la ilusión, se consume a pasos agigantados.

El Sábado Santo, en el Nou Camp se ponía de largo la jornada treinta. El Barça recibía al Recreativo, que salió a jugar sin complejos, pero que en el primer minuto de partido ya perdía por 1-0, tanto de Iniesta. No le perdió la cara al partido el equipo de Alcaraz, que se recompuso y asedió el área blaugrana sin terminar de concretar cara a puerta. Mientras, los de Guardiola, se veían sobrepasados por las ganas onubenses, en una contra y con algo de fortuna (gol en propia puerta de Morris), ponían el definitivo 2-0. Con este adverso marcador, el “Recre” tampoco bajó los brazos, y siguió intentando batir a Valdés, consiguiéndolo en la segunda parte, aunque el señor de negro, inició su aparición, Eduardo Iturralde González, anuló de manera dudosa el gol del Recreativo de Huelva, no les señaló dos penaltis, uno por clara mano de Silvynho que evitó un gol, y el otro por un clamoroso empujón de Valdés que salió tardísimo. Sí que pitó una mano Iturralde en el área del Recre, igual que la del Silvynho, pero está visto que a favor del Barcelona sí se puede llevar uno el pito a la boca. Marró sorprendentemente Messi la pena máxima (no estuvo a gran altura el argentino), hecho que no incidiría a posteriori en el desarrollo final del encuentro, el Barça se quedó los tres puntos, por méritos propios y arbitrales. La manita de siempre, ¡que no falte!

0-2 se impuso el Málaga de Antonio Tapia al Villarreal en el Madrigal. Los de Pellegrini con la mente puesta en el choque del miércoles ante el Arsenal, estuvieron lentos, fallones y superados en las contras por un eléctrico rival, con Eliseu siendo la mejor arma de los andaluces. Para colmo de males, el equipo castellonense perdió a Senna, baja sensible que se suma a la de Cazorla, y que no transmite buenos augurios de cara al encuentro de vuelta en el Emirates. Chapó para el Málaga, en UEFA a dos puntos de Champions, temporada enorme la que están cerrando, un club con un presupuesto de trece millones y medio de euros, que viene a ser la mitad del sueldo de Terry o Ibrahimovich. Sobresaliente seguro, ahora falta saber si en mayo la matrícula de honor será un hecho.

Llegó el domingo, de Resurrección. Día muy taurino en el calendario y también futbolístico.

En el Bernabéu a las cinco de la tarde, el aficionado merengue acudía con la ilusión de ver a su equipo resucitar, jugar un fútbol distinto del que viene desplegando. La cosa se resume bien fácil, “tus ganas”. Porque el equipo de Juande Ramos jugó como siempre, aburriendo a las moscas, invitando al sueño, haciendo que aquellos que ven los noventa minutos por completo se conviertan en auténticos héroes, en fieles seguidores. 2-0 venció el Real Madrid al Valladolid, con goles de Raúl (cuando de nuevo las voces discordantes aparecían, el capitán volvió a cerrar bocas) y Robben, que culminó un magistral pase de “Guti” (el ‘14’ blanco puso la única dosis de buen gusto) de cincuenta metros. Los de pucela apenas inquietaron al Real, no creyeron en la posibilidad de obtener algo positivo del coliseo de Concha Espina, y les pasó lo de siempre, acudes al Bernabéu a empatar y te vas para casa con la derrota. Sigue el Madrid a seis puntos de diferencia del Barça, dos partidos, quedan ocho, uno directo entre ellos, darle la vuelta a la tortilla queda difícil, sobre todo cuando el huevo está pegado a la sartén por una de sus caras.

Debutaba nuevo entrenador en el banquillo del Betis. Lo hacía en el Sardinero, y José Manuel Nogués, pudo hacer cierto el dicho “entrenador nuevo, victoria segura”. 2-3 ganó el equipo de don “Manué”, que podrá gozar de una felicísima Pascua de Resurrección. Emaná fue el baluarte bético, el bastión al que sus compañeros se aferraron, y con el que pudieron lograr unos oxigenantes y vitales tres puntos.

A vida o muerte se jugaba el partido en Soria entre el Numancia y el Espanyol. Los dos necesitadísimos de lograr la victoria, que no cayó de ningún frente. 0-0 y a seguir inmersos en la escalada para salir de la zona fantasmagórica de la liga.

Camacho ha impregnado a Osasuna de su casta y garra, y los “rojillos” a base de coraje y fuerza, con una gran racha han logrado afianzarse fuera de los puestos de descenso. Ayer vencieron en casa al Athletic por 2-1, dejando claro que quieren permanecer en la BBVA y de paso metiendo en la pugna por no descender al flamante finalista de Copa. Los de Caparrós no deben confiarse en demasía si no quieren pasar apuros a final de temporada.

In extremis se llevó el Valencia los tres puntos del Molinón. Gol de Mata en el noventa, 2-3 y de vuelta a puestos de Liga de Campeones. Los asturianos del equipo de Emery, Villa y Mata, junto con un golazo de Silva, fueron clave en la victoria de los chés ante el Sporting de Gijón, que no mereció perder el partido, pero que no estuvo acertado ni cara a puerta, ni en defensa, donde anduvieron flojos y dubitativos. Villa fue homenajeado como el hijo pródigo, y correspondió anotando gol y no festejándolo ante la afición que tanto le admira. De bien nacido es ser agradecido.

2-0 ganó el Mallorca al Almería. Golazo de chilena de Cléber Santana incluida. Los baleares fueron mejores en la segunda parte que los pupilos de Hugo Sánchez que se vieron sobrepasados en los últimos compases del partido, y que se llevaron una merecida derrota.

Dio la sorpresa el Getafe en un partido dificilísimo. Primero por la entidad del rival, el Sevilla, porque se jugaba en el Pizjuán, campo muy complicado para sacar algo positivo, y por último por el estado de ansiedad en el que se haya el cuadro de Víctor Muñoz, que supo aguantar las embestidas de Kanouté, Luis Fabiano y Perotti, y en una postrimera contra conducida y bien finiquitada por Gavilán, hizo que los “azulones” sacaran los tres puntos de Sevilla, y llenen un poco la botella de oxígeno de la salvación, que en las últimas jornadas había sufrido un alarmante descenso.

Se acababa la trigésima jornada en Riazor. Partidazo entre Deportivo y Atlético. 1-2 final para los rojiblancos, con un gran Agüero que fue el principal aval de los de Resino para sacar los tres puntos. No mereció perder el Deportivo de Lotina, pero el gran partido de Leo Franco hizo que los tres puntos viajaran de la Coruña a Madrid, para que el Atleti mantenga viva la ilusión por meterse en Copa de Europa.