El Barça sudó para lograr obtener un punto en Mestalla ante un gran Valencia y el Madrid se dejó dos puntos en el Sardinero en un partido pobrísimo de los blancos
Antonio Blanca
Fue mentar la bicha y parece que a Madrid y Barça los ha mirado un tuerto. Saltaron Del Nido, Fernando Roig y otros máximos mandatarios de otros clubes para hablar de la bipolaridad de la liga, de que los demás pelearían por la tercera plaza, incluso se barajó la posibilidad de jugar ante los dos colosos del fútbol español con los juveniles, puesto que jugara quien jugase la goleada en contra estaba garantizada. Pero hete aquí que se despertaron los demás futbolistas y dijeron de BBVA bipolar nada de nada. El Barça y el Madrid se han dejado ya cuatro y cinco puntos respectivamente, y ni los culés ni los blancos están entre los cuatro primeros del campeonato. Queda mucho hasta llegar a mayo, se llevan cinco jornadas, aunque efectivas solo cuatro por la huelga del fútbol y a expensas de lo que hoy ocurra, un recién ascendido como el Betis puede ser líder, el Valencia de Emery (curioso que este hombre no ha abierto la boca para quejarse de nada, y con trabajo, muy pero que muy bueno, está haciendo un bloque compacto y dominador) es quien manda en esta liga.
La jornada entre semana se inició el martes con tres choques. El primero fue en el Reino de Navarra, entre el Osasuna y el Sevilla. Antaño duelo duro rayano en lo violento. El de esta temporada partido de poco fútbol, pocas ocasiones por parte del Sevilla en la que su portero Javi Varas fue su principal protagonista. Osasuna no encontró la fórmula para vencer a los de Marcelino, así que el reparto de puntos entre los dos contendiente fue lo mejor.
Cayó el Mallorca de Laudrup en el Madrigal. 2-0 a favor del Villarreal. El equipo de Garrido necesitaba ganar por lo civil o por lo criminal, puesto que el mal comienzo de campaña arrojaba muchísimas dudas sobre la plantilla castellonense. También ha empezado mal y en ello continua el equipo balear. Michael Ladrup está con la espada de Damocles sobre la cabeza y el próximo fin de semana puede ser crucial para el futuro de éste y del equipo.
La Real sumó el martes contra el Granada en Anoeta. Victoria 1-0, por la mínima y con justicia. Los de Montanier (el técnico francés está demostrando su gusto por el fútbol exquisito) fuero superiores ante su rival, que se puso como gato panza arriba, garras fuera y a defenderse de las llegadas de los donostiarras que encontraron el gol en un “centrochurro” de Estrada que sacó los colores del cancerbero granadino.
El grueso del campeonato se jugó ayer a las ocho de la tarde. Alegría a medias en las radios y en los oyentes que volvieron a disfrutar de los carruseles de antaño, si bien se sigue privando del derecho a la información a los medios de comunicación radiofónicos, no permitiendo la narración ni la entrada de micrófonos inalámbricos. Una censura previa que contraviene al artículo 20 de la Constitución Española, y que se refleja negativamente en la audiencia.
Radamel “Tigre” Falcao. O mejor dicho Falcao “maravillao”. Maravilla de futbolista, lo remata todo y casi siempre en dirección a portería. Grandísimo delantero este colombiano que hace vibrar al Calderón a ritmo de bachata. Lleva cinco goles, que deberían ser ocho porque se le han anulado tres que eran legales. Ayer el Atlético de Madrid sin Diego (estaba tocado) goleó al Sporting. Otro 4-0 para mayor gracia de la parroquia colchonera que está disfrutando de los suyos. El sábado tiene el equipo del profe Manzano un complicadísimo examen en el Camp Nou ante el Barcelona que querrá ganar para no perder comba con respecto a los puestos primeros. El Sporting es el colista de la BBVA tras un nefasto comienzo, made in Preciado, que esta próxima jornada puede tener su primer match ball. El Atlético pone la directa rumbo hacia arriba y ya se siente el “tss, tss, que viene, que viene”.
El Levante venció en Vallecas no exento de polémica. Se impuso 1-2 al Rayo Vallecano. Los de Juan Ignacio Martínez se ponen en puestos europeos gracias a los goles de Valdo y Ballesteros. Los locales se desquiciaron y en sala de prensa acusaron a los granotas de simular y tirarse, aparte de provocar. Palabras de Botelho y Sandoval. A ver si Mourinho iba a llevar a razón…
Golazo de falta de Cazorla para poner al Málaga tras ganar 1-0 al Athletic de Bilbao en posiciones de Copa de Europa. Vuelvo a lo de antes queda mucho y la liga va por rachas, pero el inicio del equipo de Pellegrini es muy esperanzador. Cada vez juegan más rápido, con más y mejores combinaciones. El equipo de Bielsa sigue en construcción y bajo mi entender el míster argentino solventará la papeleta y tomará oxígeno, pero es evidente que por el “botxo” se echa en falta el acento sevillano de Caparrós.
Vaya imagen. Para meter en la lavadora y centrifugar al máximo. Empate a 0 en el Sardinero entre el Racing y el Real Madrid. En partidos así se pierden las ligas, el Madrid tropieza por dos veces en la misma piedra y está labrando el camino para no conquistar la BBVA. Con una actitud cuestionable, una aptitud deplorable, no se puede salvar a ningún jugador. Solo un remate entre los tres palos en noventa minutos. Un cabezazo de Callejón que Toño atrapó sin mayor dificultad. El equipo de Cúper realizó un partido de mucho mérito, muy bien plantado sobre el campo, cerrando espacios y ahogando el medio blanco. Los de “Mou” más preocupados por el arbitraje, con la defensa floja, con el medio sin ideas, Alonso no aparece y Lass… es Lass. Ozil ha caído en picado, Di María está desquiciado, Ronaldo es humano y con tres puntos de sutura en el tobillo no rinde ni la mitad, y Benzema vuelve a ser el de siempre, un alelado monigote. Con estos ingredientes el Madrid cocina un caldo rancio e intragable. Ante dos rivales en teoría inferiores, Levante y Racing los merengues solo han sacado un punto, la cabeza está a tres, y las sensaciones son cada vez peores. No en vano, los madridistas llevaban cinco años sin encadenar dos partidos sin vencer y ojo al dato, tres últimos partidos un solo gol, y mientras Agüero marcando a pares en Inglaterra. Florentino le da cariñitos a Mourinho.