miércoles, 11 de marzo de 2015

UN MADRID GROTESCO Y APOCADO

Carlos de Blas

Pocas veces se habia pitado tanto a un equipo. El peor partido que se recuerda en el Bernabeu en mucho tiempo. Esa es la sensación con la que ha salido el aficionado del campo tras ver el lamentable espectáculo que ha ofrecido su equipo durante los noventa minutos. El público acabó gritando ¡fuera, fuera! a pesar de que el Real Madrid se había clasificado para los cuartos de final. Y es que rozó la tragedia. Durante diez minutos el drama y el pánico se adueñaron de los aficionados, del entrenador y de los jugadores. No en vano al Madrid le metieron cuatro goles en su propio estadio. Se clasificó, sí, pero con un juego muy malo.

El Real Madrid acabó debajo de su porteria y pidiendo la hora en su propio estadio y después de traer un 0-2 de Alemania. Por poco el Madrid no está fuera de Europa. En el minuto 84 Huntelaar daba la emoción a un partido en el que los alemanes pasaron por encima de los de Ancelotti. Quedaban seis minutos para el final y el conjunto alemán se ponía por delante 3-4. A un solo gol de la eliminación. Y el Schalke las tuvo pero esta vez Casillas estuvo fino para evitarlo. 

Los blancos completaron un decepcionante partido en el Santiago Bernabéu ante un Schalke, en el que brilló con un doblete el holandés Klaas-Jan Huntelaar, que estuvo a un tanto de eliminar al defensor del título. En la recta final el equipo alemán tuvo ocasiones para completar la gesta pero respondió con dos paradas el arquero Iker Casillas, desafortunado antes en los goles que encajó.

Los pupilos del técnico italiano empezaron el choque algo dubitativos, dejando demasiados huecos en la banda izquierda defendida por el portugués Fabio Coentrao. Por ese costado llegó el primer susto de los visitantes, con una jugada culminada por Choupo-Moting con un disparo bastante desviado a la izquierda de Iker Casillas.

El centrocampista Max Meyer comenzaba a hacer estragos en la línea ofensiva de tres cuartos, y precisamente una arrancada suya propició lo que acabaría convirtiéndose en el 0-1. A los 20 minutos, una de sus cabalgadas se tornó en asistencia a la banda derecha para que allí, Barnetta, ejecutase un centro raso aprovechado por Fuchs para controlar y batir a Casillas con un fuerte zurdazo.

Aún con el susto en el cuerpo, la tragedia se mascaba en el Bernabéu, cuyo aficionados pronto encontraron alivio con el empate convertido por Cristiano Ronaldo. Apenas cinco minutos después del tanto inaugural, el atacante portugués conectó un cruzado remate de cabeza a la salida de un córner botado desde la esquina diestra, superando así el marcaje de un defensor y sellando el 1-1.

Pese a todo, el equipo madridista no se encontraba cómodo en el campo y eso se plasmó en la recta final, donde sus constantes desequilibrios defensivos volvieron a poner en aprietos a Casillas. El delantero visitante Klaas Jan Huntelaar avisó con un bonito derechazo que se estrelló en la cruceta del portero blanco, quien en la siguiente jugada ya no pudo evitar el gol. El propio Huntelaar transformó el 1-2 (min.40) al beneficiarse del corto despeje del guardameta local a un tiro de Meyer; Casillas dejó el balón muerto y el 'cazagoles' Huntelaar volvió a adelantar al Schalke.

Cristiano Ronaldo, el más 'enchufado' entre las filas del Real Madrid, salió de nuevo al rescate de sus compañeros, que hallaron un bálsamo con el 2-2 obra del delantero luso. Al borde del descanso, una jugada entrelazada del ataque merengue se consumó en un centro de Coentrao, cuyo pase fue directo a la cabeza de Cristiano; el delantero efectuó un testarazo en suspensión (min.45+1) que bien valió la relativa tranquilidad que el marcador de 2-2 brindaba a la afición madridista.

Evitando que la dinámica de la segunda parte siguiese los mismos derroteros, el atacante francés Karim Benzema se encargó de despejar la inquietud madrileña, firmando el 3-2 en los primeros compases de ese segundo acto. Tras una jugada algo embarullada de Coentrao, el balón le cayó al delantero galo, quien dribló a un defensa por el interior del área alemana hasta deshacerse del portero Wellenreuther con un quiebro y enviar la pelota al fondo de la red.

El Schalke 04, pese a que ya veía lejos de dar la campanada en el Bernabéu, nunca cejó en su empeño y propició más sobresaltos. Casi a renglón seguido del tanto de Benzema, el mediocentro Sané puso de nuevo la igualada con un bonito zurdazo que entró, con rosca y a media altura, en el arco de un Casillas que tuvo más trabajo del esperado en las horas previas.

Los pupilos de Roberto Di Matteo siguieron merodeando al área contraria, quizá con más romanticismo que con razón, ante un Real Madrid que vislumbraba en Casillas la pieza más efectiva de su entramado defensivo. No en vano, el equipo alemán rozó la remontada gracias a otro tanto de Huntelaar (min.84), que en una arrancada a la espalda de la defensa madridista se plantó delante de Casillas para batirlo (3-4) con un potente remate que se coló en la portería ras golpear en el travesaño.

El conjunto teutón achuchó hasta el pitido final, pero sin la fortuna suficiente para coronar una remontada que hubiese puesto patas arriba a la parroquia merengue. Los aficionados germanos que abarrotaban su grada en el Bernabéu, fueron testigos de un buen encuentro de su club que acabó sin el premio deseado durante todo el duelo con sus incesantes cánticos.

Este resultado privó al Real Madrid de lograr el récord de victorias consecutivas en 'Champions League', el cual se queda en las 10 de los merengues y del Bayern Múnich. Ademas, el club madrileño cosechó como local una fea derrota, lo cual no se producía desde abril de 2011 (en semifinales ante el FC Barcelona por 0-2), rompiendo además su racha como invicto en su estadio de los últimos 21 partidos.