lunes, 23 de noviembre de 2009

Y TRAS LA TEMPESTAD SON LÍDERES

El Real Madrid después de pasar un calvario de quince días donde la cabeza de su entrenador ha estado en serio peligro afronta la semana del clásico en lo más alto de la tabla


Antonio Blanca


Justo una jornada antes del gran clásico del fútbol español, o lo que es lo mismo, que Barcelona y Real Madrid, midan sus fuerzas el 29 de noviembre, el conjunto de Pep Guardiola, que encandila y enamora con su fútbol, cede el liderato al Madrid de Pellegrini, que no juega a nada, horroriza a sus aficionados y agrada a sus detractores, y que paradojas de este maravilloso deporte, con la clasificación para la Champions en el aire (el Barça lo tiene aún más negro que el Madrid), y tras el ridículo histórico de la Copa, los blancos visitarán el feudo blaugrana luciendo liderato, con un arranque impresionante, el mejor en los últimos 17 años, justo desde la temporada que Radomir Antic no acabó en el banquillo (lo echó Mendoza cuando el Real ostentaba el liderato, por si hay a quien le suena el estribillo de la copla), con la inmensa cantidad de palos que les han llovido, y que les van a llover. Cristiano se aventura como el paraguas de tales exabruptos contra el entrenador chileno y sus pupilos, porque ateniéndonos al resultado, no se puede discutir ni un ápice la labor de Manuel Pellegrini, pero si profundizamos el análisis, veremos como la excelencia predicada por la cúpula directiva brilla de tal modo, que son ya muchos los dirigentes merengues, que asaltan el despacho de Florentino Pérez en Concha Espina para mostrar sus dudas sobre la conveniencia que el proyecto siga en manos del entrenador actual. Son cinco meses los que lleva al frente del equipo, y los blancos ganan merced a la calidad individual y al “miedo” que los nombres serigrafiados en sus camisetas infunden a los rivales. Y pensar que rajaron tantísimo de Capello…

La undécima jornada de la BBVA se abrió en el Heliodoro Rodríguez López. Partido en la isla de Tenerife, para que el Sevilla fuera de vacaciones. Se lucieron Kanouté, Renato y Perotti. Los de Jiménez vencieron 1-2 sin despeinarse, y afilan colmillos y se frotan las manos, que ya hace frío de cara al próximo fin de semana, duelo de alto voltaje entre Barça y Madrid del que los andaluces esperan cosechar sus tres puntos y equipararse a uno de los dos motores de esta liga. En la Maestranza gustan los carteles de tres espadas y no los mano a mano.

Quique Sánchez Flores pasó esta semana la gripe A, pero no ha pasado la gripe Rojiblanca. Números desastrosos los que presenta el equipo del Atlético de Madrid, peor en siete puntos que el año del descenso y el peor arranque en la historia del club desde el 1956. Un drama, que como no podía ser de otra manera, vivió su momento culmen en el minuto 93 del partido en la Coruña. Pablo comete un penalti claro cuando el marcador reflejaba 1-1 y reparto de puntos. Pero son las historias del Atleti. Guardado marcó para el Depor, y el punto de Riazor se quedó en la nada más absoluta. Muy mal pinta el equipo del Manzanares, que debe dar un cambio radical si no quiere escribir otra página más de su historia desde los infiernos.

Yo me aburro, tú te aburres, él se aburre, nosotros nos aburrimos, vosotros os aburrís y ellos se aburren. Perfectamente conjugado el presente del verbo aburrir. Justo esa situación es la que genera el Real Madrid. Aburrimiento a la enésima potencia. Será líder y habrá firmado el mejor arranque de temporada desde hace 17 años, pero es obvio que los blancos no saben a lo que juegan, que dependen de alguna contra o inspiración de una de sus tantas estrellas y que su juego deambula de un oscuro denso a leves pinceladas claras. Kaká no aparece, Benzema no justifica su multimillonaria inversión y Xabi Alonso está en un proceso de definición. Con este panorama, el Madrid ganó con un pobre 1-0 al Racing de Santander en un partido en el que los cántabros estuvieron mucho tiempo atenazados por un temor infundado, y cuando se lo lograron sacudir, a punto estuvieron de crear otro escándalo en el Bernabéu (que nadie olvide que la afición blanca ya pidió la cabeza de su entrenador este año). Llegará el Real Madrid al Camp Nou el domingo que viene en lo más alto de la tabla, con la sensación de que peor no se puede hacer y con la llegada de Ronaldo el juego mejorará. Pero ojo, que el traspié culé no significa que el libro no esté abierto a un final de capítulo distinto. ¡Afilen estilográficas!

Para cerrar el sábado futbolístico un partido histórico y de gran sabor en nuestro fútbol. Marco inmejorable, San Mamés. De un lado el Athletic de Caparrós, “leones” todo corazón. De otro, el aire artista bohemio del Barcelona de Guardiola. Resultado, 1-1. La casta de los bilbaínos pudo con el corte elegante de los catalanes. Con las bajas que el Barça acumulaba, más la de Messi (la entrada de Amorebieta fue merecedora de expulsión) por problemas de aductores, el empate no es tan malo, claro que deja entrever que no todo en el fútbol son partidazos, que los de Guardiola no son perfectos y que hace mucho daño la sensación de observar como un flojo Real Madrid te arrebata la primacía a siete días del clásico. El domingo las aguas pueden volver a su cauce.

Para el domingo quedaba el resto de encuentros, los de los equipos que no tienen semana “Champions”.

El Mallorca conquistó su sexta victoria consecutiva en el Ono Estadi, un verdadero fortín esta temporada, al derrotar por 3-1 al Almería del mexicano Hugo Sánchez, que dispuso de las mejores ocasiones para anotar en la primera mitad, pero que al perdonar la vida a su enemigo, y más si este está en estado de gracia, lo acabó pagando y caro.

Se confirma la recuperación paso a paso del Villarreal. Venció 3-1 al Real Valladolid, con Nilmar ejerciendo por fin como estrella. Respira con más tranquilidad y de modo más profundo Ernesto Valverde, entrenador muy cualificado, pero al que la soga traicionera de los resultados apunto ha estado de segarle el cuello.

Con dos contragolpes venció el Getafe al Espanyol a domicilio. Los de Michel querrían jugar siempre ante el equipo barcelonés. Los azulones hace 10 días los echaron de la Copa del Rey, y ahora vuelven a vencer en el Cornellá-El Prat por idéntico resultado, 0-2. La falta de gol en el cuadro de Pochettino comienza a pasar factura.

La relación con el gol está mucho peor en el Xerez que en el Espanyol y no ha mejorado en la undécima jornada, ya que el marcador no se movió en su partido en el estadio Municipal de Chapín contra el Sporting de Gijón. En su primera temporada en la máxima categoría, el Xerez sólo ha anotado tres goles, lo que explica que ocupe el penúltimo lugar con siete puntos.

El colista Málaga empató a 1 en La Rosaleda con el Zaragoza, en un partido plagado de incidentes y en el que fueron expulsados Javier Paredes, por los visitantes, y el brasileño Weligton por los locales. El Zaragoza se adelantó en el minuto 48 del segundo tiempo al batir su delantero brasileño Ewerthon, de penalti, al meta uruguayo Gustavo Munúa. En el 78, el debutante Iván González firmó las tablas.

Si el Sevilla no quiere que Barcelona y Madrid se le escapen, el Valencia quiere seguir metido en el vagón de cabeza y no perder la sombra de los tres equipos de arriba. Para ello, con goles de Villa, Albelda y Marchena ante Osasuna en Pamplona se bastaron. 1-3 ganaron los chicos de Emery a un desdibujado equipo navarro, más pendiente de presionar al árbitro que a su rival, y ante tanta desconcentración, así les fue a los “rojillos”.