A
falta de saber cómo pasará el Valencia, los cuatro representantes españoles
estarán presentes en la siguiente ronda de la Champions League, Barça y Málaga
como primero, el Madrid segundo
Antonio Blanca
Hacía
tiempo que el fútbol patrio no se plantaba ni tan altanero ni tan lozano en los
octavos de la Copa de Europa. Póquer de equipos, para decir y demostrar en el
viejo continente que la salud de la llamada mejor liga del mundo sigue siendo
impecable, que en tiempos de crisis y dificultades nuestros representantes
seguirán peleando ahora en las eliminatorias por obtener lustre deportivo y
cómo no, beneficio en las arcas. Ahora llega la Champions de verdad, bueno
ahora no, este top 16 futbolístico se
verá las caras a partir de febrero de 2013, en diciembre ya sabremos los
emparejamientos y cómo quedan definitivamente los grupos, lo que ya sí que
sabemos son conjuntos que estarán en dicha fase y como primeros el Barcelona,
Málaga, Borussia Dortmund y Manchester United. Como segundos el Milan, Real
Madrid, Benfica o Celtic y Galatasaray o Cluj. Quedando por aclarar entre estas
parejas ya clasificadas quién será primero y segundo respectivamente: Oporto y
PSG; Schalke 04 y Arsenal; Shaktar Donetsk, Juventus y Chelsea, estando los
ingleses casi fuera; Bayern Múnich y Valencia.
Estos
serán los mejores 16 equipos de Europa en 2013, los que busquen estar el 25 de
mayo en Wembley.
El
martes Messi y su Barça sacaron en el frío moscovita y casi sin sudar producto
de la temperatura y del rival su partido ante el Spartak de Moscú. 1-3, de
nuevo marcando el argentino por partida doble. No para, sigue y sigue en su
idilio con el gol y el buen juego, maravillando y sonrojando. Es un auténtico
fuera de serie, un futbolista descomunal que para colmo está arropado por otros
dos hombres de cualidades estratosféricas con un balón en sus pies, Xavi e
Iniesta o Iniesta y Xavi, vaya pareja, vaya trío. Insisto y no quiero menospreciar,
pero hasta yo ganaría títulos con estos tres seres de otra galaxia en mi
equipo. Un único pero para el conjunto de Vilanova que ya está metido como
primero en los octavos de final cumpliendo sobradamente en un grupo muy
asequible, la “Messi dependencia” de la que viene haciendo gala últimamente. Qué
es el mejor y el que más en forma está no cabe duda, que va a volver a ganar el
Balón de Oro tampoco, pero el conjunto culé debería tener otros planes para los
raros los días en los que el argentino está apagado.
Mestalla
volvió a vibrar después de hace mucho tiempo. 1-1 entre los de Pellegrino y el
Bayern de Múnich. El enfrentamiento recordó otros tiempos, esos en los que
Cúper ocupaba el banquillo che y la ciudad del Turia soñaba con ser grande,
disputando dos finales de Copa de Europa. Eran otros tiempos. Ahora, el
Valencia sufre económicamente y en liga su posición no es boyante, pero con
sacrificio y orgullo los jugadores ches ya están en octavos y pueden ser
primeros. Con un hombre menos pusieron contra las cuerdas a los alemanes,
incómodos durante los noventa minutos, y si no es por un fallo defensivo, los
pupilos de Pellegrino se hubieran quedado los tres puntos y una primera plaza
merecida que tendrán que jugársela en la última jornada.
El
miércoles y con frío polar en Rusia el Málaga se dejó remontar un 0-2 en la
bella ciudad de San Petersburgo ante el Zenit. El partido acabó 2-2 con reparto
de puntos que deja contentos a los andaluces. Un punto necesario para
certificar ser primeros, para escribir la historia con mayúsculas en una
primera participación inmaculada, sin conocer la derrota, dejando boquiabierta
a toda Europa. El Málaga de Pellegrini podrá disfrutar de una ronda de
eliminatorias de noche grande de Liga de Campeones. A partir de ahí, todo lo
que venga será un regalo.
Otra
vez los fantasmas en el Real Madrid en su gran competición, en la que todos los
madridistas anhelan. La Décima, que
se resiste desde el año 2002, cuando Zidane bajó aquel obús del cielo y lo hizo
el gol más bello de todos los tiempos. Con Mourinho se hacía más factible el poder
pelearla, en dos años dos semifinales, contra el Barça cayendo con polémica,
contra el Bayern en penaltis. Pero esta edición dista mucho de la de aquel
equipo que masacraba todo lo que tenía por delante. Dos victorias, dos empates
y una derrota, hacen que el Madrid pase a octavos matemáticamente como segundo,
lo que le obliga a jugar la ida en su casa y casi le asegura un coco. Cierto que
el grupo era temible, campeón de España, Inglaterra y Alemania. El Borussia les
ha pintado la cara al City y al Real. Los alemanes son la otra grata sorpresa
de esta Champions. El Madrid en
Manchester jugó una buena primera parte, 0-1 al descanso, pudo dejar el partido
finiquitado si Ronaldo y Khedira (el alemán dispuso de cuatro claras ocasiones)
hubieran acertado ante Hart. Pero no fue así, y en el segundo tiempo se dedicó
a defender, y a recibir palos de los de Mancini. El árbitro Rocchi realizó una
actuación extremadamente casera, y se inventó un penalti sobre Agüero de
Arbeloa que le costó al defensa la expulsión. Buena ocasión tuvo el Madrid de
jugar un soberbio partido ante un duro rival, pero al equipo le falta un último
toque, una definición que no llega, una
carrera que se echa de menos. Las Copas se ganan en primavera, y el parón
invernal puede ser bueno. Todo sea buscar el lado positivo de una clasificación
irregular.