El
técnico José Mourinho lleva un 74’1% de partidos ganados al frente del Real
Madrid, el mejor porcentaje de los seis equipos que ha entrenado a lo largo de
su brillante carrera en los banquillos
Antonio Blanca
Me
dan vergüenza los medios de comunicación (sin miedo a señalarlos, As, El País,
El Economista, algunos comentaristas de Marca…) que cargan la escopeta y
disparan contra el técnico portugués sin argumentos, solo por pura
disconformidad o por antipatía. ¿Cómo se puede tener la falta de rigor, llegar
a ser tan soez, tan realmente pueril para comparar a Mourinho con Mussolini,
señor Diego Torres? ¿Eso lo recoge el libro de estilo de El País? Todo porqué
un sector del Bernabéu, los Ultras Sur admiran a Mourinho. Lamentable. Hasta este
punto de sensacionalismo burdo ha llegado el “periodismo deportivo”, que no
tiene nada de periodismo y menos de deportivo, más bien de una ordinariez
vomitiva. Al leerlos lo que uno quiere sufrir es una agnosia verbal temporal.
Luego
que si Mourinho incita al odio, que si es un mal educado, que si… mucho chau
chau, poca explicación. Me pregunto qué pretenden determinadas personas con
tales comparaciones. ¡Con un dictador! Por Dios, a quién ha coartado Mourinho sus
libertades, a quién ha fusilado… Precisamente José Mourinho habla a la cara,
con sinceridad, dice lo que piensa, con total libertad, aguanta todas las
preguntas y responde. Defiende su causa y lo más importante muere con sus
principios, sin engañar a nadie. Todos aquellos que lo critican por totalitario
se equivocan profundamente. Se les perdona porque no habrán leído ni a Nietzsche
ni a Wittgenstein. Se pierde el norte con suma facilidad cuando el espurio
interés prima más que el rigor. Claro que si cualquiera puede coger una pluma…
Así les va, y no me alegro, el lector no es imbécil y menos quiere que se lo
hagan creer las cavilaciones de unos serviles “chupasangres”.
Ya
dijo Napoleón que “tratar al adversario con respeto es proporcionarle al
adversario una ventaja que no merece”. Hay que tener el carácter de ganador de
Mourinho para aguantar la campaña tan vil que han orquestado contra él. Acoso y
derribo cueste lo que cueste. Hacer de su vida un imposible. Luego todos estos
querrán que en las ruedas de prensa el luso sea educado, después de todas las
comparaciones y acusaciones que tiene que sufrir. Hay prensa que se dice “anti
mourinhista”. Pues él por ende puede ser anti periodistas. Entramos así en una
espiral de “y tú más”, pero si el del medio de comunicación tiene la libertad
de expresión por bandera para insultar, el entrenador del Real Madrid (por más
que le duela a muchos papanatas) también. O todos moros o todos cristianos.
The Only One se irá, de
eso no cabe duda. Como que lo hará cuando haya hecho su trabajo, cumpliendo y
dejando un equipo en ciernes.
Ahora
bien, me atrevo a aventurar y para mala fortuna de todos sus detractores,
ávidos de ver la rendición de Mourinho, que The
Only One, ya no de Special, posee
ese gen ganador que tienen muy pocos, y no dejará que nadie le haga saltar del
barco. Peleará hasta el final y como en el fútbol las penas y alegrías duran un
parpadeo, puede que los que ahora disfrutan y se frotan las manos, los que
publicitan este escarnio público, los que venden un falso madridismo y señorío,
los que quieren dividir a la afición en buenos (contra “Mou”) y malos (hay que
tener mala fe para tildar a quienes admiran a Mourinho como yihad), se den de bruces con la
realidad, la de tener en el banquillo del club más laureado de la historia al
que hasta el momento es el mejor inquilino para ocuparlo. Sus números ahí
están. Tapando bocas. En 139 partidos con el Madrid ha ganado 103, empatado 20
y perdido 16. Suma 376 goles a favor, y 119 en contra. Eso en el Real porque si
miramos su palmarés global como entrenador no ha lugar a la discusión: con el
Oporto: 2 ligas, 1 Copa de Portugal y 1 Supercopa, 1 UEFA (ahora Liga Europa) y
1 Copa de Europa. Con el Chelsea: 2 Premier
League, 1 FA Cup, 2 Copas de la Liga, 1 Community
Shield. Con el Inter de Milan: 2 Scudettos,
1 Copa de Italia y 1 Supercopa, 1 Copa de Europa. En la actualidad con el
Madrid: 1 Liga, 1 Copa del Rey, 1 Supercopa.
Ha
dicho Casillas que se puede estar siendo injusto con Mourinho. Yo quito la
posibilidad y asevero con total rotundidad que se está siendo injustísimo con
el míster portugués. El hombre que ha hecho morder el polvo al mejor Barça de
la historia. Ganando una liga batiendo todos los récords, venciendo a ese
Barcelona messianico en una final de
Copa del Rey, cayendo frente a él en unas semis de Champions con dos arbitrajes
para mirarlos, y este mismo verano ganándole una Supercopa por bemoles. ¿Cómo
se puede tratar así a este hombre? Que tiene un currículum envidiable y difícil
de igualar. Me quedo catatónico a veces.
Todo esto
en a colación a lo que una parte del Bernabéu ayer le dijo a su entrenador. No
sé hasta qué punto los pitos fueron directamente contra Mou o contra quiénes
más cánticos le dedicaron, los Ultras Sur, porque ovaciones de una mayoría del
Bernabéu para con su técnico las hubo a raudales.
Pues
perfecto. Todo el mundo tiene una opinión y su derecho a mostrarla, repito todo
el mundo. Quién rechace las formas del portugués también tendrá la capacidad
para saber valorar que Mourinho ha sido el único entrenador capaz de derrotar,
varias veces, al “equipo de moda”. Aquí y en toda Europa. Que ha ganado tres
títulos, de mayor o menor importancia, en sus dos años largos. Que uno de esos
títulos, la liga, es lo mejor que han visto nuestros ojos y los de nuestros padres
y abuelos. Pero bien las formas por delante. Si alguien me ilustra donde está
el libro de formas correctas en el fútbol me haría un gran favor.
Claro que tales formas no parecen importar cuando al madridismo lo llevan
llamando facha desde hace más 10 o 12 lustros. A este club de señorío y opereta
le censurado ser franquista, ladrón, centralista y tirano, comprador de
árbitros…
Pero
como esos apelativos no han salido de boca de Mourinho, pues gustan. Hay que
poner la otra mejilla.
En
señorío nadie gana. Aplausos al rival. Genial, pero para ese “chulo egoísta”
que es un profesional como la copa de un pino, que se parte el alma por la
camiseta que viste, con el ‘7’ a la espalda, para ese nada. Pititos cuando tira
faltas, ¿no hay valor para una pitada en condiciones?
No se puede hablar de árbitros, que a ese del 7 le revientan la cara o el
tobillo, se lo merece, por portugués, por jugar en el Madrid, como todos los
insultos que recibe. Pero si se señala la pierna, o pide calma, que lo lleven a
juicio, o ni siquiera eso, que lo lapiden públicamente. Ahora si el Madrid da,
tres semanas debatiendo si hay que desterrar o no al jugador que ha cometido
tal acción. Lo mismo ocurre con Mourinho. Todos los insultos hacia su persona
están justificados.
Mourinho no refleja el señorío. ¿Qué es eso precisamente? ¿Están los del
señorío y por detrás el resto? ¿Les da pavor a los del señorío ver como la
inmensa mayoría del madridista de a pie está con su entrenador? Como bien dijo
Mourinho así como el madridista más ilustre de todos los tiempos, don Santiago
Bernabéu, lo importante es ganar por encima de todas las cosas.
Los del señorío olvidan y perdonan todo lo que viene de fuera. Eso sí ni olvidan ni perdonan lo que está dentro, llegando hasta el paroxismo de la estupidez...como contra el Alcoyano. De tal modo que son capaces de rebuznar contra el hombre que le ha dado la vuelta a la tortilla. Les gusta escupir hacia arriba y ver como cae, sin ellos moverse para que los de fuera les aplaudan. Pero luego estos no pasan por alto ni una al Real Madrid. Palos, palos y más palos. ¿Realmente quiere el Real Madrid este señorío? Seguro que no.