El
Atlético de Madrid se pone a ocho puntos del líder de la BBVA, tras el
inesperado pinchazo del Barcelona en Anoeta
Antonio Blanca
Que
el Barcelona haya tropezado no significa que porque sus inmediatos
perseguidores lo hayan aprovechado con sendas victorias para recortar tres
puntos haya liga. No hay sencillamente porque el Barça dispone de un enorme
colchón de puntos como para tan siquiera imaginar un escenario de remontada y
que se acerquen a cuatro o cinco puntos. El Atlético está realizando una
temporada de sobresaliente, lástima que no le dé para matrícula al tener
enfrente a un equipo que hasta el sábado solo se había dejado dos puntos de
todos los que había disputado. Perdieron los blaugranas y Madrid y Atlético
vencieron a Valencia y Levante respectivamente. Alguna jornada este hecho tenía
que ocurrir, porque en una liga de este nivel es muy pero que muy difícil concluir
treinta y ocho partidos sin perder ninguno. No sé si los culés volverán a
perder esta temporada en liga, pudiera ser, pero claro, para poder vender una
remontada habría de estar seguro que Madrid y Atleti seguro que no iban a
volver a pinchar, y de eso precisamente es de lo que más firme convicción
tengo, los dos equipos madrileños en algún partido volverán a regalar puntos.
La
segunda vuelta de la BBVA se inició el viernes en el Cornellá-El Prat. El
Espanyol se enfrentaba al Mallorca. Choque igualado entre dos conjuntos que
tienen escrito en su devenir liguero sufrir por no caer a la Adelante. Al final
los tres puntos se quedaron en casa, 3-2 ganaron los de Aguirre a los pupilos
de Caparrós que hasta por dos veces se habían puesto por delante en el marcador
y terminaron desperdiciando su ventaja. Los “pericos” vencen y bracean por
eludir los puestos de abajo.
Cuatro
meses sin ganar en los Cármenes de Granada llevaban los de Anquela para y esto es
lo que tiene el fútbol, recibir al Rayo Vallecano, uno de los equipos de moda y
ganarles fácil, por 2-0 y antojándose el marcador corto. Una victoria que le
vale de nuevo a Anquela como moneda salvavidas y que hace que los andaluces
dejen de estar en puestos de descenso.
Tenía
que llegar y en San Sebastián llegó. El Barcelona tras culminar una primera
vuelta histórica, de récord, cediendo solo dos puntos y ganando todo lo demás,
ha comenzado la segunda vuelta con un traspié tras perder en casa de la Real
Sociedad por 3-2. Y eso que los de Vilanova se pusieron 0-2, parecía que la
maldición de Anoeta también caería este año, pero no fue así. El equipo de Montanier
se puso el mono de trabajo, sacó el pincel y bordó el lienzo en la segunda
parte. Tres goles para poner el 3-2 definitivo, para hacer de esta semana del
Barça de los récords, una semana para olvidar, empate en Copa ante el Málaga y
derrota liguera. Ahora bien, es solo un partido perdido, entiendo que haya
quien quiera hacer ver que la liga peligra y que puede haber de nuevo emoción. No
se equivoquen. Ha sido una mera caída y los culés se repondrán como quien cae
en una colchoneta y se levanta sin magulladuras. En treinta y ocho partidos, la
lógica invita a pensar en un tropiezo o dos, máxime cuando los rivales están
muy despegados y se puede sestear un poco.
1-1
empató el Sevilla en Getafe en el debut liguero de Emery en el banquillo
sevillista. Fue noche fría la madrileña. Los andaluces gozaron de oportunidades
para ampliar el tanto de Reyes tras un pase genial de tacón de Rakitic, pero
Moyá estuvo muy inspirado y atajó todo lo que fue entre sus tres palos. El Getafe
con un golpe directo por medio de Colunga puso las tablas en el marcador y el
reparto de puntos, que desde luego no vale para nada al Sevilla en su intento
de escalar posiciones.
También
empataron a uno el Málaga y el Celta de Vigo en la Rosaleda. Se adelantaron los
de Pellegrini con gol de Demichelis tras una embarullada jugada. Luego el Celta
puso tesón para lograr un punto de un difícil estadio. La noche podría haber hecho
inclinar la balanza de un lado u otro, pero el acierto de Cavallero y Javi
Varas en las dos porterías evitó que el luminoso reflejara otro resultado.
En
la mañana de domingo, Osasuna ganó al Deportivo de la Coruña en el Reyno por
2-1, una victoria muy necesaria para los de Mendilíbar que siguen en la zona
baja de la tabla. El equipo gallego con la derrota se queda como farolillo rojo
de la liga BBVA y pinta un panorama negro y tenebroso, el cual aún se está a
tiempo de variar, quedan por delante dieciocho partidos para evitar retornar a
segunda división un año después de haber cogido el ascensor de la gloria.
El
Valladolid se quedó los tres puntos al vencer en Pucela por 2-0 al Zaragoza de
Manolo Jiménez. El portero Roberto que estuvo muy bien evitó un mayor castigo
para los maños que solo pudieron contemplar el magistral partido que los chicos
de Djukic realizaron en una gélida tarde invernal de Enero. Con este resultado
el Valladolid se queda en la zona media tranquila de la tabla y el Zaragoza
empieza a ver por el espejo retrovisor a los luchadores por eludir el descenso.
En
el Vicente Calderón el Atlético de Madrid recibía al Levante. Dos noticias
buenas y una mala las que cosecha el conjunto de Simeone tras el partido. La mala
la lesión por unas tres semanas de su estrella Radamel Falcao. La primera de
las buenas, los colchoneros se ponen a ocho puntos del Barcelona, tres
partidos, por lo que pueden pensar en intentar la remontada, algo que siendo
realistas es cuasi imposible. La otra buena nueva, los rojiblancos ya suman
doce partidos ganando de manera consecutiva en el Vicente Calderón, números que
le hacen acreedor a pensar que la segunda plaza no debe correr peligro, aunque
el aliento del que viene por detrás es su peor enemigo, su bestia negra, el
Real Madrid.
Partido
de Fallas en Mestalla, el Valencia ante el Madrid con el precedente de la
polémica arbitral por el choque de Copa del Rey. Ambiente caldeadísimo con el
que la grada che recibió a los merengues. A los nueve minutos del partido la
llama se apagó con un jarro de agua fría. Higuaín marcó gol y el Madrid
desplegó su mejor fútbol, firmando el mejor partido en lo que llevan de
temporada. 0-5 se fueron los de “Mou” al descanso. De los pitos al árbitro,
buen partido el realizado por Teixeira Vitenes, se pasó al “Llorente vete ya”
de la grada, que abandonó prematuramente el estadio. Di María jugó un buen
partido por completo y la defensa comandada por Albiol y Varane apenas si echó
en falta a Pepe y Ramos. Dos goles de Ronaldo con sendas asistencias de Ozil
que también jugó un gran choque para certificar una posible resurrección, a
falta de confirmación en unas hipotéticas semis de Copa ante el Barcelona y los
octavos de final de Champions contra
el United. Por el momento, al equipo físicamente se le ve mucho mejor y la gran
noticia para los de merengues es la recuperación de la pegada, esa que tanto
los caracterizó la pasada temporada y que este presente curso los había
abandonado.
Esta
noche el Benito Villamarín despide la vigésima jornada con el partido
Betis-Athletic de Bilbao.