Tras
la salida del entrenador portugués de la casa blanca el Madrid ha entrado en
una espiral de derrotas y malos partidos frente a sus dos grandes rivales
Antonio Blanca
Los
datos hablan por sí solos. Datos sí datos. En las últimos tres temporadas, el
Real Madrid solo ha ganado un partido liguero contra Atlético de Madrid o
Barcelona. En estos once partidos cuenta con una victoria, dos empates y ocho
derrotas. Las estadísticas muestran una de las razones por las que a este
equipo le cuesta una barbaridad ganar la Liga. Cinco puntos de los treinta y
tres posibles en las últimas tres temporadas (el 15,15% de los puntos
posibles), a falta de la visita al Camp Nou esta campaña.
Sin
duda unos resultados nada halagüeños, y más si se comparan con los veintiséis
de los treinta y seis posibles (el 72,2%) obtenidos por Mourinho en su etapa en
el Madrid.
Fue
el Atleti al que Mourinho derrotó con mayor solvencia. Ni un solo punto perdió
el luso contra el Atlético de los dieciocho que disputó durante los tres años
que estuvo en España.
En
estos últimos tres años la única victoria que los blancos registran fue la
temporada pasada contra el Barça en el Santiago Bernabéu. Ese encuentro terminó
3-1 y fue la última victoria cosechada contra uno de los grandes. Desde ese
encuentro, en octubre de 2014, los resultados han sido dos derrotas contra el Barcelona
y dos derrotas más un empate contra el Atleti.
Contra
los catalanes los resultados son algo más positivos que contra los colchoneros,
ya que fue el enfrentamiento liguero del año pasado su última victoria contra
un grande. Desde entonces han perdido los dos siguientes partidos contra los
culés, siendo especialmente lacerante el 0-4 del pasado mes de noviembre en el
Bernabéu.
Es
más llamativo el bagaje contra el Atlético de Madrid, de ser una víctima segura
para los blancos a ser una de sus bestias negras desde la salida del club de
Mourinho. Tras la etapa de Mourinho, el Madrid suma tres derrotas consecutivas
en el Bernabéu, dos empates en el Vicente Calderón y la dolorosa derrota por
4-0 sufrida la temporada pasada con Ancelotti en el banquillo.
Los
rojiblancos llevaban 14 temporadas sin ganar al Madrid, desde el año 99,
gracias a un doblete Hasselbaink y un gol de José Mari. Pero parece que en los
últimos años han revertido esa situación, coincidiendo con la salida de
Mourinho y con el crecimiento deportivo rojiblanco tras la llegada de Simeone.
Si bien es cierto que la primera victoria del Atlético en mucho tiempo fue en
la final de Copa del Rey del año 2013 (1-2) con Mourinho en el banquillo.
Desde
la temporada 2010/2011 hasta la salida del portugués los datos contra el Atleti
eran demoledores: seis partidos ligueros, seis victorias para los blancos.
Con
un total de 16 goles a favor por solo 4 en contra. Sin embargo, con la llegada
de Ancelotti los resultados son completamente adversos. De los seis partidos
disputados en estos tres años, dos empates y cuatro derrotas demuestran que
Simeone tiene cogida la medida al Real Madrid.
Como
bien digo solo son datos, ahí están, pueden interpretarse como cada uno desee,
lo cierto es que ahora Barça y Atlético en dos campañas consecutivas le han
endosado sendos 4-0 (uno como local y otro como visitante) y el sonrojo y la vergüenza,
junto con la indignación y a veces la desidia se han instaurado en el Santiago
Bernabéu. Es corolario que el Real Madrid necesita un cambio y cuanto antes
mejor.