jueves, 4 de octubre de 2018

PRIMERA CRISIS DE LOPETEGUI

Desde la segunda etapa de Fabio Capello el Madrid no concatenaba tres partidos sin ver puerta

Antonio Blanca

¿El Real Madrid ha planificado mal la temporada? Es la pregunta que colea en todos los corros deportivos. Florentino Pérez no quiso fichar a un sustituto de garantías para Cristiano Ronaldo (451 goles en 438 partidos), el mejor jugador de la historia merengue y el equipo lo está pagando, al menos en el primer tramo de la temporada. Mariano no cuenta de momento para Lopetegui y, con Bale lesionado, Benzema queda como única referencia. Lo curioso es que el francés nunca ha sido un rematador, y está pareciéndose al jugador inoperante de la pasada campaña salvo en momentos puntuales.

El equipo blanco ha pasado de jugar con Cristiano Ronaldo (referencia) y Benzema (no es una referencia) a hacerlo solo con el francés. Bale, cuando está bien, ayuda a marcar goles aunque juegue en banda, pero si el Real Madrid juega solo con el francés arriba tiene un problema de gol. El resultado es que el equipo lleva tres partidos sin hacer gol, algo que no pasaba desde la 06/07 con Capello como técnico.

Este Real Madrid está diseñado para tener una referencia arriba. En el choque ante el CSKA solo la tuvo cuando entró Mariano, que intentó todo tipo de remates dentro del área. En uno de ellos, el balón se estrelló en el palo. Benzema no pisó el área en casi todo el partido y eso dio muchas facilidades a los centrales, acostumbrados a marcar a un delantero como hacían con Cristiano Ronaldo.

Con Benzema solo arriba, Lopetegui metió ante el CSKA un centrocampista de banda más (Lucas Vázquez). Esto propició más control de balón, circulación y más juego, pero ante un equipo tan encerrado por el centro, las jugadas terminaban en centros desde las bandas que no encontraban rematador porque sencillamente no lo había.

El Madrid necesita gol y Mariano lo tiene. No es lo mismo que Cristiano, pero es más goleador que Benzema. Una de las señas de identidad de este Madrid son y han sido las bandas, y tanto Carvajal como Marcelo han sido los mayores asistentes del equipo.

Con todo esto, el Real Madrid ha marcado en La Liga un total de doce goles en siete partidos, una cifra que no llega ni a dos goles por encuentro. Muy lejos de los números a los que nos tiene acostumbrado este equipo. El Madrid, sin Cristiano, necesita a Bale más que nunca, pero más una referencia y la única que tiene es Mariano.