Julio Candela
Bayern de Múnich e Inter de Milán se verán las caras en la final de la Liga de Campeones del Santiago Bernabéu con la intención de suceder al Barcelona en el trono europeo. Dos holandeses que no 'valían' para el Real Madrid, Arjen Robben y Wesley Sneijder, pueden levantar el cetro continental en la que fuera su casa la pasada temporada y de la que salieron por la puerta de atrás.
Ahora, tan sólo una temporada después de haber dejado el Real Madrid, pueden lograr el título para el que Florentino Pérez llevó a cabo un desembolso superior a los 250 millones de euros sin contar con ambos jugadores holandeses en su plantilla. Robben, en verdadero estado de gracia, y Sneijder, determinante en el esquema de Jose Mourinho, pueden lograr el título de campeón del viejo continente.
Por si fuera poco, Mourinho y Louis Van Gaal también pueden entrar en la historia de la Liga de Campeones. Uno de los dos será el ganador de la final, convirtiéndose en el tercer entrenador que consigue hacerse con la 'Champions' con dos equipos distintos, después de Ernst Happel -que lo lograra con el Feyenoord en 1970 y con el Hamburgo en 1983- y de Ottmar Hitzfeld -Borussia de Dortmund, en 1997 y Bayern de Múnich, 2001-.
Además, Inter de Milán y Bayern de Múnich tienen la oportunidad de igualar el logró de seis títulos conseguidos la pasada temporada por el equipo de Pep Guardiola, pues ambos equipos han logrado el 'doblete doméstico' -Liga y Copa-. Para más inri, Mourinho pone algo más de morbo a este partido, ya que puede convertirse en campeón de Europa en la que puede ser su casa la próxima temporada.
Italianos y alemanes ocuparán las plazas de finalista en el Bernabé, puestos que la afición madridista y azulgrana soñaba con que ocuparán Real Madrid y Barcelona. Los blancos, organizadores de la finalísima, fueron eliminados, un año más, en octavos de final por un 'sorprendente' Olympique de Lyon, mientras que el Barcelona fue eliminado por el Inter de Mourinho en las semifinales. Pero la presencia 'española' está asegurada en la final.
Arjen Robben, Wesley Sneijder, Walter Samuel y Esteban Cambiasso -quien sabe si Morurinho lo hará en próximas fechas- engrosan la lista de ex del Real Madrid, mientras que Samuel Eto'o, Thiago Motta -que no jugará la final por expulsión-, Mark van Bommel y Louis Van Gaal -además de Mourinho- lo hacen por parte azulgrana.
En lo puramente deportivo, ambos equipos cuentan con una importante baja en su once ideal. Van Gaal no podrá contar con Franck Ribéry en al final, después de ser expulsado en la ida de la semifinal ante el Olympique de Lyon y ser sancionado con dos partidos. Mourinho, por su parte, no podrá contar con Motta, expulsado en el partido de vuelta ante el Barcelona por doble amarilla. Una final con mucho morbo, sobre todo por la vuelta de Robben y Sneijder al que fuera su estadio.
Bayern de Múnich e Inter de Milán se verán las caras en la final de la Liga de Campeones del Santiago Bernabéu con la intención de suceder al Barcelona en el trono europeo. Dos holandeses que no 'valían' para el Real Madrid, Arjen Robben y Wesley Sneijder, pueden levantar el cetro continental en la que fuera su casa la pasada temporada y de la que salieron por la puerta de atrás.
Ahora, tan sólo una temporada después de haber dejado el Real Madrid, pueden lograr el título para el que Florentino Pérez llevó a cabo un desembolso superior a los 250 millones de euros sin contar con ambos jugadores holandeses en su plantilla. Robben, en verdadero estado de gracia, y Sneijder, determinante en el esquema de Jose Mourinho, pueden lograr el título de campeón del viejo continente.
Por si fuera poco, Mourinho y Louis Van Gaal también pueden entrar en la historia de la Liga de Campeones. Uno de los dos será el ganador de la final, convirtiéndose en el tercer entrenador que consigue hacerse con la 'Champions' con dos equipos distintos, después de Ernst Happel -que lo lograra con el Feyenoord en 1970 y con el Hamburgo en 1983- y de Ottmar Hitzfeld -Borussia de Dortmund, en 1997 y Bayern de Múnich, 2001-.
Además, Inter de Milán y Bayern de Múnich tienen la oportunidad de igualar el logró de seis títulos conseguidos la pasada temporada por el equipo de Pep Guardiola, pues ambos equipos han logrado el 'doblete doméstico' -Liga y Copa-. Para más inri, Mourinho pone algo más de morbo a este partido, ya que puede convertirse en campeón de Europa en la que puede ser su casa la próxima temporada.
Italianos y alemanes ocuparán las plazas de finalista en el Bernabé, puestos que la afición madridista y azulgrana soñaba con que ocuparán Real Madrid y Barcelona. Los blancos, organizadores de la finalísima, fueron eliminados, un año más, en octavos de final por un 'sorprendente' Olympique de Lyon, mientras que el Barcelona fue eliminado por el Inter de Mourinho en las semifinales. Pero la presencia 'española' está asegurada en la final.
Arjen Robben, Wesley Sneijder, Walter Samuel y Esteban Cambiasso -quien sabe si Morurinho lo hará en próximas fechas- engrosan la lista de ex del Real Madrid, mientras que Samuel Eto'o, Thiago Motta -que no jugará la final por expulsión-, Mark van Bommel y Louis Van Gaal -además de Mourinho- lo hacen por parte azulgrana.
En lo puramente deportivo, ambos equipos cuentan con una importante baja en su once ideal. Van Gaal no podrá contar con Franck Ribéry en al final, después de ser expulsado en la ida de la semifinal ante el Olympique de Lyon y ser sancionado con dos partidos. Mourinho, por su parte, no podrá contar con Motta, expulsado en el partido de vuelta ante el Barcelona por doble amarilla. Una final con mucho morbo, sobre todo por la vuelta de Robben y Sneijder al que fuera su estadio.