Con
ocho jugadores nuevos convocados por Vicente del Bosque arranca la tercera
etapa de una nueva selección tras el estrepitoso fracaso del Mundial 2014
Antonio Blanca
España inicia hoy jueves 4 de septiembre, en un
escenario de relevancia, el Stade de France de París, y ante un rival de
enjundia, Francia, el comienzo de la era post Brasil con la casi obligación de
ofrecer una imagen más cercana al equipo que dominó el fútbol en los últimos
seis años que al que estuvo en el pasado Mundial. Sin el lesionado Iniesta, el
'tocado' Piqué y con la ausencia de otros jugadores que han decidido abandonar
la Selección, como Xavi y Xabi Alonso, el encuentro se presenta como una
reválida para otros como Casillas o Diego Costa tras su paupérrima actuación
mundialista y como una oportunidad para los menos habituales.
Apenas
dos meses después de marcharse de suelo brasileño por la puerta de atrás y bajo
un alud de críticas, la ‘Roja’ retorna a la acción con un partido amistoso de
primer nivel, aquellos que no hace bien poco eran una cierta ‘tortura’ para un
equipo luego prácticamente imbatible en los oficiales. Sin embargo, tras lo
ocurrido en el Mundial, no hay margen para otra cosa que sea la de comenzar la
regeneración competitiva de la todavía actual doble campeona de Europa.
Esta
nueva España se estrenará en Saint Denis, un escenario precisamente de gratos
recuerdos para esa generación de oro del fútbol nacional, capaz de ganar en sus
dos últimas visitas, en 2010 (0-2, David Villa y Sergio Ramos), y 2014 (0-1,
Pedro), la segunda de ellas vital para estar de forma directa en la Copa del
Mundo.
Sin
embargo, el objetivo de volver a repetir estos éxitos se antoja algo más
complicado, ya que al flojo nivel mostrado por los de Vicente del Bosque se une
la llegada de mucha savia nueva y que su rival, por el contrario, firmó un
Mundial más revitalizante a nivel anímico y afronta esperanzada los dos años
que le restan para volver a ganar un gran torneo en su país, la Eurocopa de
2016.
La
selección española jugará ya sin algunos de sus símbolos del pasado como Xabi
Alonso, Xavi Hernández y David Villa (estos dos últimos no debieron jugar nunca
el pasado Mundial), y con sensibles bajas como las de Gerard Piqué o Andrés
Iniesta, por lo que Del Bosque tiene una buena oportunidad de ver caras nuevas,
sobre todo para el estreno en la fase de clasificación para el próximo torneo continental
el lunes 8 en el Ciudad de Valencia ante la modesta Macedonia.
El
salmantino, que no ha tenido la dignidad de dimitir, volverá a confiar en Iker
Casillas, que retorna a París tras perderse la última visita por lesión, para
la portería, mientras que en la defensa debe buscar una pareja para Sergio
Ramos, con nuevos como Mikel San José o Marc Bartra, o un veterano como Raúl
Albiol. En los laterales, el pujante Carvajal busca su sitio ante la dupla
Juanfran-Azpilicueta.
En
el medio, las despedidas de Alonso y Xavi y la baja de Iniesta, abren las
puertas a buen grupo de futbolistas jóvenes de talento como Koke, dispuesto a
acaparar ya un mayor protagonismo en la ‘Roja’, un Iturraspe en gran estado de
forma, o un Isco que regresa pese a que sigue sin ser fijo en el Real Madrid.
Arriba,
se mantiene la confianza en Diego Costa, que ha firmado un buen comienzo de
temporada en el Chelsea, lo mismo que Cesc Fábregas, de nuevo a un gran nivel
en su nueva etapa en el conjunto londinense, aunque jugando en una posición
diferente a la que le suele usar Vicente del Bosque y el famoso ‘falso 9′.
Menos
cambios existen en la Francia de Didier Deschamps, que prácticamente apenas ha
retocado el grupo con el que compitió en el Mundial, donde el combinado francés
brilló hasta que se topó en cuartos con Alemania y su efectividad. Pese a la
eliminación, el ánimo es mucho mejor en las filas galas que con el que se
acudía a Brasil, clasificada desde la repesca nuevamente.
De
todos modos, el técnico de los ‘bleus’
no podrá contar con uno de los emblemas del equipo en los últimos años, ya que
Franck Ribéry anunció su retirada internacional. Tampoco estará el defensa
Laurent Koscielny, sustituido por el azulgrana Jérémy Mathieu, por lesión, lo
mismo que Olivier Giroud, por lo que el peso ofensivo recaerá en Karim Benzema,
de momento peleador nuevamente con el gol con el Real Madrid y que podría estar
acompañado por el rojiblanco Antoine Griezmann.
El
objetivo de Deschamps es empezar a afinar la puesta a punto para la Eurocopa de
dentro de dos años y se apoyará en el físico para intentar bloquear el juego de
una selección española que se le ha atragantado a Francia en los últimos años.
La actual campeona continental ha ganado cuatro de los últimos cinco
enfrentamientos, tres de ellos oficiales, y sólo cedió un empate a última hora
en el Vicente Calderón en la fase de clasificación para el Mundial.