martes, 1 de diciembre de 2015

LUIS ENRIQUE CICLO TRIUNFAL

Jordi Grimau

Dos ciclos triunfales del Barcelona que encuentran importantes semejanzas en sus inicios y posterior desarrollo. Viendo al actual Barça de Luis Enrique y echando la vista atrás, no se puede negar que evoca a aquella fantástica versión del conjunto azulgrana dirigida no hace tanto tiempo por Josep Guardiola, hoy entrenador del Bayern de Múnich germano.

Se estrenaba Guardiola en Liga como técnico del primer equipo del Barcelona contra el Club Deportivo Numancia, en el estadio de Los Pajaritos, el 31 de agosto del año 2008. Sus hombres caían derrotados por la mínima en Soria (1-0), consumando una decepcionante primera actuación en la edición 2008/09 del campeonato nacional de la regularidad. Las sensaciones negativas se prolongarían una jornada más, con la visita del Racing de Santander al Camp Nou, la cual se traduciría en un pobre empate a uno final frente al conjunto cántabro.

Tras aquellos tan malos como sorprendentes resultados iniciales, comenzaba a hablarse ya de una posible destitución de Pep. Pero el entonces presidente del Barça, Joan Laporta, mantuvo la calma y aguardó a que se produjera un giro en los acontecimientos. Y este llegó. La temporada terminaría con la conquista del famoso sextete (Liga, Copa del Rey, Campions League, Supercopa de España y de Europa, y Mundial de Clubes) y con la satisfacción extra de haber goleado por 2-6 al eterno rival, el Real Madrid, en su propia casa, el mismísimo estadio Santiago Bernabéu.


Pues bien, Luis Enrique también empezó su etapa como entrenador azulgrana generando dudas, hasta el punto de atreverse a dar un toque de atención a Lionel Messi y Neymar da Silva. El técnico asturiano dejó de inicio en el banquillo a ambos cracks en la visita del Barcelona a la Real Sociedad en el estadio de Anoeta correspondiente a la decimoséptima jornada de la pasada edición del Campeonato Nacional de Liga. Un desafío que casi le cuesta el puesto al preparador natural de Gijón. 

Sin embargo, nuevamente un presidente del Barça tuvo paciencia, en esta ocasión Josep Maria Bartomeu. Como Laporta en su día, acertó; obtuvo 'su' triplete y el equipo da la impresión de seguir con paso firme instalado en la senda de la victoria.