jueves, 30 de diciembre de 2010

FELIZ 2011

Se termina un año plagado de éxitos deportivos en muchos ámbitos, pero si este 2010 será recordado por algo en especial es por la conquista del Mundial de fútbol por España

Antonio Blanca

Recapitularé como es preceptivo, a un día de que despidamos 2010, bendito año para el deporte español, que ha ocurrido durante todo este año, deseando que el próximo a estrenar 2011, nos traiga los mismos o mayor cantidad de éxitos.

Así que junto a los éxitos en otras disciplinas deportivas, el año en que Rafa Nadal se ha convertido en santo y seña del deporte patrio, jamás olvidaremos 2010 por un hito, un hecho impensable hace poco más de unos meses. Generaciones y generaciones de españoles hemos vivido acomplejados, mirando los campeonatos del Mundo como algo inalcanzable, un camino al matadero que más pronto que tarde nos dejaría con la misma cara boba de siempre. Pero este pasado verano, una generación ganadora, nuestros “chicos de oro”, cambiaron las tornas y el devenir de la Historia. Se acabó la pifia de Cardeñosa y Zubizarreta, el penalti de Eloy o Joaquín, el codazo de Tassotti, el robo de Al Ghandour…

Del Bosque y la “Roja” nos regalaron el verano de nuestra vida. ¡Campeones del Mundo! Y lo más importante, dejando huella. Será un equipo como el Brasil del 70, la Argentina de Maradona o la Francia de Zidane, con la diferencia que no es la España de nadie, sino es un estilo, “fútbol-arte”, comandado y dirigido por Xavi Hernández y Andrés Iniesta, vaya pedazo de joyas (candidatos en Enero al Balón de Oro). Con Casillas como ejemplar capitán y mejor guardameta del mundo. Villa, Alonso, Puyol, Ramos y compañía que completan un plantel de ensueño e inolvidable. ¿Quién no recordará toda la vida la noche del 11 de julio de 2010? ¿Dónde estábamos próximas las once de la noche cuando Iniesta junto a 46 millones de almas de rojo y gualda marcaba el 1-0 en la prórroga?

Junto con el Mundial, hubo liga, la más igualada de los últimos tiempos, mano a mano entre Barcelona y Real Madrid que cayó del lado blaugrana. Segunda consecutiva para el Barcelona de Guardiola que suma ya 20 cetros ligueros. Fue un campeonato en el que los catalanes se vieron agobiados hasta el final por un pertinaz Real Madrid, que se dejó la victoria en los duelos directos contra el Barça. A Pellegrini lo condenó los fracasos ligueros, la vergüenza de Alcorcón en Copa del Rey, y matar las ilusiones del madridismo cayendo en los octavos de la Champions frente al Olympique de Lyon, el año que se disputaba la gran final en el Santiago Bernabéu.

La Liga ya no volverá a ver a dos clásicos. Ni la Liga, ni el Real Madrid. “Guti” dijo adiós, se fue al Besiktas turco. Un genio al que la cabeza le falló durante su estancia en el equipo blanco.

La otra gran salida, las más dolorosa, pues fue la marcha al Schalke 04 del eterno capitán del Real Madrid, don Raúl González Blanco. 15 años con la zamarra madridista, tras Di Stéfano, el hombre leyenda, el más laureado en la historia del club de Concha Espina. Y su despedida fue penosa. Un 26 de julio, un Raúl emocionado, ante un semivacío Bernabéu se iba para siempre de la que fue su casa. El gran capitán se merecía otro adiós. El tiempo pondrá a cada uno en su sitio, porque no puede Florentino Pérez, irse de rositas tras cargarse de mala manera a símbolos de la historia del club. Tiempo al tiempo.

La Champions cayó 49 años después para el Inter de Milan con Milito, Eto’o, Sneijder y sobre todo Mourinho en el banquillo como estrellas. Ganó al Bayern de Munich en la final, pero quedará para el recuerdo la batalla de semifinales contra el Barcelona en la que el portugués demostró ser un grandísimo estratega, dentro y fuera del terreno de juego. La anécdota de la Champions de este 2010 que se marcha, los aspersores la noche del 28 de abril en el Camp Nou (un poquito de por favor, hay que saber perder también). Mourinho esa misma noche se ganó ser el candidato número 1 para sentarse en el banquillo del Real Madrid. Truncó eliminando al Barcelona la gran aspiración de los culés, hacerse ni más ni menos con la Copa de Europa y en el campo del eterno rival. El Madrid suspiró de alivio, y le dio venia a “Mou” para dirigirlo. Así se confirmaría en el mes de julio, “The Special One”, un tipo único se sentaba en el banco merengue.

Neptuno también tuvo fiesta casi tres lustros después. La tuvo por partida doble y pudo ser triple, pero el Atlético de Madrid que realizó una gran final de Copa del Rey perdió contra el Sevilla (golazo de Diego Capel) que fue quien el 26 de mayo estuvo de fiesta. Dos semanas antes, en Hamburgo, con un frío cortante, Diego Forlán se convirtió en leyenda colchonera con un gol en la prórroga ante el Fulham, en la final de la Liga Europa, que ponía el definitivo 2-1 en el marcador y que daba al Atlético de Madrid su primer título europeo.

Meses después en agosto, el Atlético en un gran escenario como Mónaco le sacó los colores al Inter de Milan, ya no de Mourinho, sino de Rafa Benítez en aquella época (el madrileño no se ha comido los turrones) y ahora de Leonardo. Gran partido del Atleti que se llevaba su segundo título europeo, la Supercopa de Europa.

Otra Supercopa, la de España se la embolsó el Barcelona. A Guardiola la ida le salió rana, apostó mucho por los canteranos en un envite oficial y el Sevilla se impuso con solvencia. La vuelta fue otro cantar, y con Messi en comandante en jefe el Barcelona se llevó casi sin despeinarse el primer torneo oficial de la temporada.

En diciembre, Rafa Benítez pudo salvar la cabeza con su victoria en el Mundial de clubes, pero al abrir la boca la pifió y Moratti decidió guillotinarlo. Demasiado peso el de sustituir a un Mourinho querido y triunfador. Tenía más que perder que ganar Benítez en Milan, y así ha quedado patente. Esto me trae a la mente el exitazo de don Vicente del Bosque, que cuando se hizo con las riendas de España también tenía más que perder que ganar, lo único que le quedaba por conquistar era el Mundial, y así lo hicimos. Tenemos una cuenta pendiente en 2013 con la Concacaf.

Tenemos este año solo competiciones domésticas. Duelo Barça-Madrid por la liga (aún colea el 5-0 del Camp Nou). La Champions League se resolverá el 20 de mayo de 2011 en Londres, un escenario mágico.

Todas las espadas en lo alto, para disfrutar de goles, jugadas, emociones, que hacen de este deporte algo único, que une más que desune, y que da felicidad, hasta extremos éxtasis absoluto, de locura colectiva como vimos en el pasado Julio de 2010, bendito Mundial. Por todo y por ello, tengan ustedes una gran entrada de año y un ¡Feliz 2011!