Hace
un año el dejo en el ojo del portugués sobre el entonces segundo entrenador
culé le catapultó a la fama, hoy se ven las caras en la ida de la Supercopa
Antonio Blanca
El
partido de ida de la Supercopa de España que medirá a Barcelona y Real Madrid
esta noche de jueves en el Camp Nou va a ser el primer duelo oficial entre el
nuevo primer entrenador blaugrana, Francesc “Tito” Vilanova, y su homólogo
blanco, José Mourinho, tras el adiós de Pep Guardiola la campaña pasada.
El
destino ha querido que este primer duelo sea en el mismo escenario en el que,
el pasado año, Mourinho metió su dedo en el ojo de Vilanova cuando este era el
ayudante de Guardiola, en medio de una trifulca provocada al final del partido
por una dura entrada de Marcelo a Cesc Fàbregas.
Con
este incidente solucionado, y olvidado (veremos hoy) por parte de ambos
técnicos, se ven las caras con este trasfondo y la incógnita de ver cuál de los
dos saldrá victorioso de este primer envite, aunque la Supercopa de España se
decidirá en la vuelta de la próxima semana en el Santiago Bernabéu.
“Tito”
Vilanova deberá hacer olvidar a su predecesor en el cargo, Pep Guardiola, ya
que su recuerdo de Pep estará presente en esta campaña. La 'era Guardiola', en
la que el Barça ganó 14 de 19 títulos posibles en cuatro años, proyecta una
sombra muy larga sobre el técnico de Bellcaire.
Los
retos del entrenador catalán comenzarán con defender esta Supercopa y recuperar
el título liguero, después de la liga de los 100 puntos del Real Madrid. Para
ello, y con los únicos refuerzos de Jordi Alba y Alex Song, Vilanova buscará no
perder el sello de juego de combinación del Barça que tan lejos le ha llegado.
Por
su parte, el portugués The Only One
intentará volver a conseguir el título liguero, después de una Liga en la que
destrozó todos los récords, con 100 puntos y 121 goles a favor. Para ello,
espera contar con el refuerzo de Luka Modric, el culebrón de este verano, en su
plantilla.
El
técnico luso, que tras muchos rumores acabó renovando hasta 2016, comienza su
tercera temporada en el equipo blanco con la clara intención de centrarse en el
campeonato nacional y en la que sería la décima Liga de Campeones para el Real
Madrid, tan ansiada por la afición blanca y por el propio preparador.
El
objetivo de ser el único entrenador que ha ganado la Champions League en tres equipos distintos, es uno de los pocos
retos que le quedan en su carrera al luso, después de haber hecho historia al
conseguir los tres títulos ligueros más importantes de Europa, tras ganar la Premier Legue, el Calcio y la competición
española.
La
cena ya preparada, esta noche se sirve.