El
a día de hoy secretario general de la Real Federación Española de Fútbol se ha
postulado como candidato y adversario de Ángel Mª Villar en las elecciones del
próximo mes de abril
Antonio Blanca
Ha
sido un golpe inesperado la decisión de Jorge Pérez, secretario general de la
Federación Española de Fútbol, de presentar su candidatura a la presidencia.
Ángel María Villar se ha topado con oposición dentro de casa. No es la primera
vez que sucede porque ya Gerardo González, destituido como secretario general,
también montó su candidatura. Da la impresión de que Jorge Pérez va a contar
con más votos de los que Villar y su Rasputín Juan Padrón podían calcular.
Habrá discusión y la campaña servirá, seguramente, para descubrir
interioridades que hasta la fecha han sido vetadas.
Pérez
(otro Pérez) no ha montado su candidatura basada en desacreditar a quien ha
sido durante años su jefe. Lo ha sido hasta ahora y lo es, incluso
nominalmente, a pesar de que está relegado y sólo se le consiente la
permanencia en el despacho. Villar ni siquiera ha querido despedirle para
ahorrarse la indemnización. Hay un pulso entre Villar y Pérez. El primero
quiere aburrirle hasta el extremo de que opte por marcharse. Mas los
acontecimientos han cambiado el curso del río.
Villar
ha mantenido, desde que tomó posesión, auténtica obsesión por poseer todo el
poder posible. Por ello peleó siempre contra la Liga de Fútbol Profesional. Que
se lleve mal con Javier Tebas no puede sorprender porque también se las tuvo
tiesas con Pedro Tomás y su antecesor Antonio Baró. En general, con todos
cuantos han dirigido la entidad aunque haya sido transitoriamente.
Villar
es un ansioso y lo quiere todo para él. No se ha conformado con ser gente en la
UEFA y la FIFA. En España pone palos en todas las ruedas de vehículos que
salgan del Consejo Superior de Deportes y la Liga de Fútbol Profesional. Podría
suceder que Villar fuera inhabilitado y, consecuentemente, no pudiera optar a
nueva reelección. Aunque tenga ya designado a su supuesto sucesor, su nombre
tal vez no tendría todos los apoyos que le puede proporcionar desde las
catacumbas de la Federación, el inefable Juan Padrón. Jorge Pérez puede ser un
gran adversario. De momento cuenta con el apoyo de Tebas y la Liga.
Por
cierto, la cantinela de los últimos años, ya quieren hipotecar al otro Pérez,
Florentino, para afearle que no quiera ceder el Santiago Bernabéu para la final
copera.