A las nueve menos cuarto de la noche del 26 de junio de 2008, la selección española de fútbol nos sentará a todos delante del televisor y con los oídos pendientes de la radio para el partido más importante de los últimos 20 años, las semifinales de la Euro 08' ante Rusia
Antonio Blanca
Conocemos al rival, de hecho en esta misma Eurocopa ya nos hemos enfrentado en el partido que abría nuestra participación, y vencimos, goleando, jugando buen fútbol (no tanto como se ha querido vender por partes interesadas), dando síntomas de ser un equipo llamado a romper maleficios y poder lograr hitos mayores. Los rusos por su parte, fuera de este enfrentamiento del pasado 10 de junio, que los dejó tumbados sobre la lona, se repusieron, poquito a poco, primero ante Grecia con la ayuda inestimable de Nikopolidis, luego apeando a la Suecia de Ibrahimovic con la primera aparición del jugador de moda. En cuartos se confirmó al enésimo grado su recuperación, baño de fútbol total, dando de su propia medicina al gran favorito a llevarse el torneo, la "naranja mecánica" de Van Basten, que había causado sensación ante Italia y Francia, y que impotente, impertérrita veía como se esfumaban sus aspiraciones a meterse en "semis" por las botas de Andrei Arshavin, ¡oh que futbolista! Maravilloso y "maravillante", digno de admirar el "Kun" ruso que hoy querrá ponernos en un brete.
Aún así, la historia nos sonríe. Por varias cuestiones. Una, Rusia sólo nos ha vencido una vez en su historia. Dos, ¡goool! de Marcelino en el Bernabéu, campeones de Europa en 1964, nuestro único trofeo importante y frente a la URSS. Tres, tenemos mejores jugadores (que no mejor selección, ni seleccionador). Cuatro, si bien nos ha costado Dios y ayuda, llanto y amargura romper la barrera de los cuartos de final ("vendetta" por fin con los italianos, tabique de Luis Enrique incluido), nunca hemos perdido unas semifinales de Eurocopa. Cinco, no hagan rima, porque ya nos toca, porque un país que tan insospechadamente ama el fútbol como España se merece celebrar ya algo, una veraniega noche de locura y parranda, pasodoble y jarana.
Esta tarde-noche saldremos de dudas, si los pupilos de Luis capitaneados por el infranqueable Iker Casillas, lograrán vencer al ejército ruso del general Hiddink. Ojalá esta vez sí, el destino no nos tenga guardada una cruel jugada y haga inútil e inservible la eliminación de los "azzurros". Pero va a ser que no, por mucho que el partido no se parezca al de la primera fase, por mucho que los rusos físicamente estén mejor que nosotros debido a que ellos están dentro de la planificación deportiva en su particular mes de "noviembre". Esta noche conquistamos a la madre patria, a Rusia, ese país donde los ejército de Aníbal o Napoleón perecieron, la armada "roja" cantará victoria. No es que quiera vender la piel del oso antes de cazarla, pero la mañana tan bella y soleada me motiva, me presta a estar optimista de cara a esta noche, tan crucial para multitud de compatriotas, que espero vibren desde Viena, desde España o desde cualquier punto del planeta. Hoy nos vestimos de rojo y gualda, de español, nos tatuamos la furia en el pecho y con el ¡a por ellos! sacamos a relucir orgullo, casta y fútbol, mucho fútbol para intentar meternos en la final del domingo, los alemanes esperan rival.
Hoy puede ser un gran día, como diría Serrat, lo saborearemos como si de un buen "Rioja" se tratara, el champagne ya se enfría en el frigorífico, España es tu gran momento.
Antonio Blanca
Conocemos al rival, de hecho en esta misma Eurocopa ya nos hemos enfrentado en el partido que abría nuestra participación, y vencimos, goleando, jugando buen fútbol (no tanto como se ha querido vender por partes interesadas), dando síntomas de ser un equipo llamado a romper maleficios y poder lograr hitos mayores. Los rusos por su parte, fuera de este enfrentamiento del pasado 10 de junio, que los dejó tumbados sobre la lona, se repusieron, poquito a poco, primero ante Grecia con la ayuda inestimable de Nikopolidis, luego apeando a la Suecia de Ibrahimovic con la primera aparición del jugador de moda. En cuartos se confirmó al enésimo grado su recuperación, baño de fútbol total, dando de su propia medicina al gran favorito a llevarse el torneo, la "naranja mecánica" de Van Basten, que había causado sensación ante Italia y Francia, y que impotente, impertérrita veía como se esfumaban sus aspiraciones a meterse en "semis" por las botas de Andrei Arshavin, ¡oh que futbolista! Maravilloso y "maravillante", digno de admirar el "Kun" ruso que hoy querrá ponernos en un brete.
Aún así, la historia nos sonríe. Por varias cuestiones. Una, Rusia sólo nos ha vencido una vez en su historia. Dos, ¡goool! de Marcelino en el Bernabéu, campeones de Europa en 1964, nuestro único trofeo importante y frente a la URSS. Tres, tenemos mejores jugadores (que no mejor selección, ni seleccionador). Cuatro, si bien nos ha costado Dios y ayuda, llanto y amargura romper la barrera de los cuartos de final ("vendetta" por fin con los italianos, tabique de Luis Enrique incluido), nunca hemos perdido unas semifinales de Eurocopa. Cinco, no hagan rima, porque ya nos toca, porque un país que tan insospechadamente ama el fútbol como España se merece celebrar ya algo, una veraniega noche de locura y parranda, pasodoble y jarana.
Esta tarde-noche saldremos de dudas, si los pupilos de Luis capitaneados por el infranqueable Iker Casillas, lograrán vencer al ejército ruso del general Hiddink. Ojalá esta vez sí, el destino no nos tenga guardada una cruel jugada y haga inútil e inservible la eliminación de los "azzurros". Pero va a ser que no, por mucho que el partido no se parezca al de la primera fase, por mucho que los rusos físicamente estén mejor que nosotros debido a que ellos están dentro de la planificación deportiva en su particular mes de "noviembre". Esta noche conquistamos a la madre patria, a Rusia, ese país donde los ejército de Aníbal o Napoleón perecieron, la armada "roja" cantará victoria. No es que quiera vender la piel del oso antes de cazarla, pero la mañana tan bella y soleada me motiva, me presta a estar optimista de cara a esta noche, tan crucial para multitud de compatriotas, que espero vibren desde Viena, desde España o desde cualquier punto del planeta. Hoy nos vestimos de rojo y gualda, de español, nos tatuamos la furia en el pecho y con el ¡a por ellos! sacamos a relucir orgullo, casta y fútbol, mucho fútbol para intentar meternos en la final del domingo, los alemanes esperan rival.
Hoy puede ser un gran día, como diría Serrat, lo saborearemos como si de un buen "Rioja" se tratara, el champagne ya se enfría en el frigorífico, España es tu gran momento.
3 comentarios:
Mucho miedo me da Rusia, no solo por Arshavin, tienen mucha velocidad, y si la defensa no esta al 100% lo vamos a pasar mal. Por cierto, este tío sí que es bueno
lo veo, el domingo contra los alemanes, campeones campeones. Ojala oi no 4 sino 5 a los rusos. vamos españaaaa
POdemos ganarle a Rusia y podemos llevarnos la Euro. POr cierto disfrutais tanto como yo con las transmisiones de la cuatro? me parto el culo
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