lunes, 15 de octubre de 2012

GUERRA EN LA FEDERACIÓN


Ángel María Villar tiene la firme intención de disputar la Supercopa española que da el pistoletazo a la temporada oficial en China, cosa que no agrada demasiado a Barça y Madrid, los dos contendientes

Antonio Blanca


Hoy lunes se prevé una enorme tensión en el seno de la Real Federación Española de Fútbol, y no por nada que ataña a la selección dirigida por Vicente del Bosque y que sigue batiendo récords a ritmo vertiginoso, sino que la tensión deriva a causa de una de las reuniones que más controversia han generado en dicho organismo en los últimos años.

El encuentro servirá para decidir si finalmente se disputará la Supercopa de España en China, según el acuerdo alcanzado con empresas asiáticas hace unos meses.

En caso de llevarse a cabo, dicho torneo se disputaría en el estadio del 'Nido de Pájaro' de Pekín en cinco de las próximas siete ediciones, y la RFEF percibiría a cambio una sustanciosa cantidad económica por exportar la competición.

El Barcelona se ha negado rotundamente a ir fuera de España a jugar la Supercopa. El club presidido por Sandro Rosell no ve bien esta posibilidad por las complicaciones que supondría en una pretemporada ya de por sí sobrecargada.

Por su parte, el Real Madrid también se muestra reticente acerca de la decisión a tomar, si bien no se cierra de forma tan contundente a aceptarla. Florentino Pérez y su junta directiva quieren estudiar bien todos los detalles sobre la operación para comprobar si podría ser rentable a nivel de marketing.

Estos dos clubes son los que han disputado las últimas dos ediciones de la Supercopa, por lo que su voz será escuchada por la Federación con especial atención. No obstante, en la decisión intervendrán también el resto de estamentos federativos, en una junta en la que ya es patente que se producirán notables tensiones y desencuentros.