Luis Enrique fue presentado este jueves como nuevo
seleccionador español de fútbol en un acto en el que avisó de que "hay
muchas decisiones que tomar" y prometió una "evolución" antes
que una revolución.
Una semana después de comunicar el nombre del nuevo
seleccionador, la Federación Española (RFEF) celebró un acto con la prensa en
el que Luis Enrique mostró su ilusión por mejorar los últimos resultados del
equipo nacional. Fue el Luis Enrique más cordial posible, alejado de la imagen
arisca que trasladó durante su etapa como entrenador del Barcelona.
Tras un vídeo de presentación con la trayectoria de Luis
Enrique como futbolista y técnico, incluida la selección española, el
presidente de la RFEF, Luis Rubiales, dio la bienvenida a su nuevo entrenador.
"Fue el único entrenador con el que hablamos. Le deseo toda la suerte y en
la federación vamos a hacer todo lo posible para que te sientas cómodo y volver
a ilusionarnos con nuestra selección", le dijo a Luis Enrique.
Posteriormente, el seleccionador agradeció la
"confianza" depositada en él. "Aquí estamos para que podamos
conquistar grandes retos y grandes objetivos. A por ellos", deseó.
El nuevo técnico fue presentado apenas cuatro días después
de que terminara el Mundial de Rusia. España era considerada como una de las
grandes favoritas, pero cayó en octavos ante la anfitriona después del
escándalo que supuso la destitución del seleccionador Julen Lopetegui. El
técnico vasco fue despedido dos días antes de debut de España después de haber
llegado a un acuerdo para entrenar al Real Madrid una vez terminara el Mundial.
Su lugar lo ocupó de forma interina Fernando Hierro, pero no pudo llevar muy
lejos a la selección.
Luis Enrique agradeció hoy el trabajo a sus dos predecesores,
aunque matizó: "El fútbol es una continua evolución y ya hace tres
campeonatos que no se pudo conquistar nada y la idea es evolucionar".
"Hay muchas decisiones que tomar. Hay cambio
generacional y hay que valorar qué es necesario para ser competitivos dentro de
dos años", añadió.
A Luis Enrique no le importó hablar de los primeros
problemas detectados en la selección española, y más concretamente en el
Mundial de Rusia, aspectos que se comprometió a intentar mejorar. "Vamos a
seguir teniendo nuestro estilo, reforzándolo e intentando mejorarlo. Hay que
defender mejor, hay que tener más profundidad y más ocasiones de gol, que es lo
que han querido mis predecesores. Se debería parecer a un equipo", relató.
Luis Enrique apostó por la buena comunicación con jugadores
y entorno. Y se le vio esforzado en su primer día como seleccionador ante los
medios. "Hay mucha expectación con esto. Soy muy cercano. Voy a intentar
ser lo más profesional posible. No seré simpático, aunque lo soy fuera con mis
amigos. Aquí no tengo que serlo. Yo separaría la relación con la prensa y con
la afición. Con la afición nunca he tenido ningún problema", dijo.
En una rueda de prensa de intento conciliador, incluso
intentó acercarse a cualquier aficionado que se pudo sentir molesto con algunas
de sus afirmaciones del pasado.
"No soy 'anti nada' y es un orgullo para mí representar
el fútbol español. Con la edad que tengo, pocas cosas hay para ser
'anti'", resumió.
Luis Enrique tendrá por delante seis semanas hasta facilitar
su primera lista como seleccionador, que será el 31 de agosto, con vistas a los
encuentros de la nueva Liga de Naciones de la UEFA ante Inglaterra (8 de
agosto) y Croacia (12).
Es el comienzo de una nueva era para la selección española y
Luis Enrique fue el elegido por la federación para intentar sacar al equipo
nacional de cuatro años con resultados como poco mediocres en las grandes
citas. "Me gusta la imagen de la selección, pero hay que
evolucionar", fue su mensaje final.