jueves, 18 de junio de 2015

EL MEDIO DE BENÍTEZ


El Real Madrid busca un jugador de corte defensivo para la próxima temporada destacando Verratti sobre los demás aunque su fichaje es poco probable

Antonio Blanca 

Uno de los principales problemas que el Real Madrid experimentó en la temporada 2014-15 se localizó en su centro del campo. Con Luka Modric de baja por lesión durante buena parte de la misma, Carlo Ancelotti no vio en Asier Illarramendi una alternativa fiable al croata en la medular; menos todavía en Sami Khedira, quien terminaba contrato con el club en junio de 2015 y parecía con la cabeza en otra parte, y tampoco, más tarde, en Lucas Silva, al que apenas concedió oportunidades. El italiano prefirió incluso armar regularmente una línea de medios ultraofensiva, con Toni Kroos como Cinco y acompañado de James Rodríguez e Isco Alarcón a modo de interiores, antes que otorgar su confianza a uno de estos tres futbolistas (dos pivotes y un box to box).

En el presente mercado de fichajes al club blanco ha llegado ya Carlos Henrique Casemiro, un jugador aunque posiblemente de mayor categoría que Illarramendi o Lucas Silva, de un corte similar al de estos. Kroos resultó presa del cansancio en distintas fases a lo largo de la pasada campaña, y Modric sufrió dolencias físicas de consideración. Quizá lo que verdaderamente haría falta en Chamartín sería acometer la contratación de un centrocampista trabajador, sacrificado, sin complejos a la hora de bajarse al barro, pero al mismo tiempo dotado de una notable capacidad de creación.

En este sentido, el nombre de Marco Verratti se ha venido asociando repetidamente al del Real Madrid en las últimas fechas. El mediocrentro italiano representa en sí mismo todo aquello que necesitaría el equipo de Rafa Benítez para vivir más tranquilo: equilibrio, orden, clase y creatividad. Y, por otra parte, encajaría a la perfección como recambio a medio plazo de un Modric que cumplirá 30 años a finales del próximo mes de agosto. El problema es que el París Saint-Germain no quiere vender al natural de Pescara, y no parece que exista posibilidad alguna de que en el Parque de los Príncipes cambien de opinión a este respecto.

Llegados a este punto, todo indica que en el Santiago Bernabéu se habrán de estudiar nuevas vías para el refuerzo del centro del campo merengue. Aquí surge la opción de Youri Tielemans. Este joven pivote belga, de 18 años, personifica la inteligencia sobre el campo, va un paso por delante de los demás en lo que se refiere a la lectura de las acciones, cuenta con un sentido táctico magnífico y recupera numerosos esféricos. Su depurada técnica le asiste en la tarea de marcar el ritmo. En filas del Anderlecht, en la Jupiler Pro League, le falta algo de experiencia, sentirse exigido al máximo nivel. Eso sí, a su temprana edad ya ha disputado en dos ocasiones un torneo del prestigio de la Champions League. Será un crack.

Como Tielemans, Geoffrey Kondogbia, Axel Witsel e Ilkay Gündogan también ofrecen altas dosis de equilibrio a través de una notable aportación en facetas de contención y elaboración. Al francés, de 22 años y una de las grandes más que promesas ya realidades de la selección gala junto a Raphaël Varane y Paul Pogba, le acompañan el físico y la calidad para erigirse en el mandamás en la medular del Mónaco. Por su parte, el belga acaba de cumplir su tercer curso en el Zenit de San Petersburgo a sus 26 años. Puso rumbo a Rusia en verano de 2012, descartando opciones más atractivas en lo deportivo, pero aún conserva un gran cartel. Se maneja a las mil maravillas con el esférico en los pies y toma buenas decisiones, una característica imprescindible en todo medio sobre el que acostumbre a recaer el peso de la iniciación y canalización del juego.

Ya interesó al Real Madrid en la época de José Mourinho como entrenador. Mientras, el alemán quizá sea el de más clase de los tres como organizador. Sin embargo, sus recientes y misteriosas lesiones de espalda cuanto menos siembran la duda en torno a la posibilidad de lanzarse a por su fichaje.

Youri Tielemans, Geoffrey Kondogbia, Ilkay Gündogan o Axel Witsel suelen ejercer el rol de mediocentros puros. Pueden actuar a modo de Cinco, en solitario por delante de los centrales, o como una de las dos piezas que integran un doble pivote. Probablemente el belga sea el único de ellos capaz de ajustarse a la posición de interior.

En el mercado de fichajes se pueden encontrar centrocampistas que sin dejar de aportar defensivamente, gozan de una mayor proyección ofensiva. Futbolistas polivalentes que pueden desempeñarse como medios mixtos, interiores e incluso mediapuntas. Tal sería el caso de Luka Modric. Un jugador de un corte parecido al suyo no le vendría nada mal al Real Madrid para rotar precisamente con el croata y Toni Kroos. Hombres como Mateo Kovacic, Miralem Pjanic, Jordan Henderson o Arturo Vidal.

Kovacic está llamado a convertirse en uno de los principales estandartes de la selección croata a corto plazo. Recuerda en estilo al holandés Wesley Sneijder, aunque cuenta con una mejor conducción de balón; eso sí, no llega al nivel de golpeo a media distancia del natural de Utrecht. A sus 21 años, supera las dos temporadas en plantilla del Inter de Milán, en la Serie A italiana, con el plus de experiencia que ello significa. Una opción interesante.

También en el Calcio, en su caso en la Roma, Pjanic (25 años) se presenta como un medio de excelente toque y visión de juego, muy técnico y con un espectacular disparo tanto en movimiento como en parado. Quizá esta última resulte su virtud más destacada. Se podría decir que Jordan Henderson (24 años), en filas del Liverpool desde el estío de 2011, se curtió al lado de uno de los mejores centrocampistas de la historia del fútbol, Steven Gerrard. El de Sunderland se supera en cada campaña. Arturo Vidal es sacrificio puro, un pulmón, un box to box de manual con una imponente llegada.

Hay vida más allá de Marco Verratti, y el Real Madrid lo sabe.