El
imperio Villar en la Real Federación Española de Fútbol puede ser puesto en
jaque por la candidatura de su antiguo Secretario
Antonio Blanca
Por
vez primera, Ángel María Villar va a tener que luchar para ser reelegido
presidente de la Federación Española de Fútbol. Jorge Pérez, exsecretario
general de la casa, se ha convertido en adversario importante. De momento, ha
logrado el número suficiente de votos para que haya asamblea extraordinaria en
que se discuta punto tan importante como la distribución de los dineros que
proporciona la Copa del Rey de la que es dueña la Federación. Pérez tiene en su
proyecto presidencial repartir los beneficios entre clubes de Segunda B y
Tercera. Quiere hacer partícipes de los beneficios de la competición a todos
los estamentos que participan en ella.
Jorge
Pérez ha tenido la habilidad de encontrar un asunto que es bien acogido por la
generalidad de los clubes de las citadas categorías. De acuerdo con su
propuesta, de los 14 millones de euros a repartir, cada club de Segunda B
recibiría 85.000 euros y cada uno de Tercera, 33.000. Esta medida, que ya cuenta
con el número suficiente de votos para convocar la asamblea extraordinaria,
puede ser el primer golpe de efecto de la candidatura de Jorge Pérez.
Villar
ha vivido con cierta tranquilidad durante más de veinte años y con el relevo de
Miguel Cardenal, Secretario de Estado para el Deporte, por José Ramón Lete, se
sintió personalmente beneficiado. Supuso que con el nuevo Secretario de Estado
iba a tener mejor conexión. Sus cantos alegres, manifestados en la revista que
edita la propia Federación, tal vez comiencen a ser menos divertidos y no sólo
por la convocatoria de la Asamblea Extraordinaria.
El
Gobierno de Felipe González instituyó lo que se conoció como la “Ley Porta”,
que recortaba los mandatos de los dirigentes federativos a dos legislaturas.
Tenía la posibilidad adicional de que, tras un mandato de descanso, el relevado
podía presentar de nuevo su candidatura. Lete ya ha anunciado, en público, ante
gentes del deporte, que en su programa existe la idea de volver a limitar los
mandatos. Villar ya ha superado cualquier medida que dicte el Gobierno.