Victoria en Villarreal del conjunto de Ernesto
Valverde no exento de polémica arbitral
Antonio Blanca
El
Barcelona sigue manteniendo a raya a sus rivales, Valencia, Atlético de Madrid
y Real Madrid, a cinco, seis y ocho puntos respectivamente. Se repitió el guion
de siempre, Messi decidiendo y Ter Stegen salvando, más un empujoncito arbitral
para llevar a la victoria a un equipo que suma quince partidos consecutivos sin
conocer la derrota (igual que el Atleti) y que sigue siendo mandando con mano
de hierro la Liga española.
A
falta que se dispute esta noche el Español-Gerona esta noche así transcurrió la
décimo quinta jornada.
Así,
el Barcelona recuperó la autoridad en La Liga Santander, tras dos empates
seguidos, con la victoria en Villarreal (0-2) para conservar la renta respecto
a sus perseguidores, ojito con la firmeza del cuadro de Simeone.
El
Real Madrid, mientras, partió hacia los Emiratos Árabes Unidos para disputar el
Mundial de Clubes, después de haber jugado los mejores minutos en Liga dando un
soberano repaso al Sevilla endosándole un 5-0 en la primera parte, con Nacho,
Ronaldo, Archraf y Kroos colosales. El equipo de Zidane decidió sestear en la
segunda parte y acabó jugando con siete españoles y un centro del campo de
futuro y ensueño con Isco, Asensio, Ceballos y Marco Llorente. A la vuelta le
espera el clásico, que afrontará con, al menos, ocho puntos de desventaja.
El
equipo de Ernesto Valverde enderezó su situación en el Estadio de la Cerámica.
No pudo con el Valencia en Mestalla ni con el Celta en el Camp Nou, pero sí
ante el Villarreal, que desperdició sus llegadas al área del alemán Marc Andre
Ter Stegen. Puso fin a la sangría de puntos el Barcelona, que redujo en cuatro
su renta respecto al Atlético, el único que ha sabido aprovechar los deslices
azulgrana.
El
Valencia, que ganó al Celta (merced a un penalti muy polémico), perdió el fin
de semana pasado contra el Getafe. Sigue segundo el cuadro de Marcelino, pero
sólo con un punto de ventaja respecto al combinado de Diego Pablo Simeone.
El
Barcelona, desprovisto del buen juego de antaño, no rompió la igualdad hasta
verse en superioridad numérica. Fue a la hora de juego cuando una dura entrada
de Daniel Rabaseda sobre Sergio Busquets supuso la expulsión del futbolista
local. Con uno más el Barcelona impuso su ley. Doce minutos más tarde el
uruguayo Luis Suárez marcó el gol que reencontró a su equipo con el triunfo.
Después, el tramo final, Leo Messi sentenció la victoria azulgrana (0-2).
Previamente,
el Atlético Madrid dio otra una nueva clase de eficacia. Venció en el Benito
Villamarín (0-1) al Real Betis, que acumula seis partidos sin ganar y que no
pudo frenar su cuesta abajo. Estableció en Sevilla un récord el Atlético, que
completó un año invicto fuera de su estadio. Fue un partido discreto pero
práctico en el que sirvió el solitario gol de Saúl Ñíguez a la media hora. El
Betis mejoró. Controló el juego. Aunque se topó una y otra vez con el férreo
sistema del conjunto de Diego Pablo Simeone, que defendió en todo momento su
ventaja y que se hizo con los tres puntos.
Se
aferra a la Liga el Atlético, fuera de la Liga de Campeones y con sus objetivos
limitados. Ya son tres partidos seguidos con los tres puntos en el bolsillo.
Levante, Real Sociedad y Betis. Y se mantiene invicto. El único junto al
Barcelona.
Después,
el Athletic recuperó el pulso gracias a su victoria en el estadio Ciudad de
Valencia ante el Levante (1-2). Puede que un premio excesivo ante un rival que
mejoró en la segunda parte, cuando ya tenía el marcador en contra y que fue
incapaz de mantener la igualada que logró en el tramo final. El Levante dejó
atrás la condición de revelación con la que arrancó el curso. Ahora acumula
partidos sin ganar. Lleva seis, desde que se impuso al Sevilla el pasado 14 de
octubre. El Athletic llevó el marcador a favor desde el minuto 5, con el tanto
de Aritz Aduriz, de penalti. El Levante encontró premio a sus mejoría en el 73,
en un autogol de Aymeric Laporte, pero seis después, Sergio Postigo, en su
propia portería, dio el segundo tanto a los visitantes. Y los tres puntos.
El
domingo arrancó con la primera victoria como visitante del Málaga, que tenía el
margen de error reducido tras los marcadores obtenidos por el resto de
candidatos a la parte baja. Pero lejos de ser un fortín, Anoeta volvió a ser
favorable, como casi toda la temporada, para los visitantes. El Málaga ganó a
la Real Sociedad (0-2) y el equipo de Míchel González abandonó el puesto de
colista. La Real, hundida en su moral tras los adversos resultados de las
últimas jornadas, trató de tomar ventaja por la vía rápida, no acertó y se vio
sometido después por un marcador en contra y un aumento de la ansiedad, que le
perjudicó. Los dos goles del Málaga llegaron desde los once metros. El primero
a los veintitrés minutos, transformado por Borja Bastón. El segundo, anotado
por el uruguayo Castro que aprovechó el rechace a otro tiro de penalti que
marró Bastón. Es penúltimo el Málaga. A un punto del Alavés y a cuatro del
Deportivo.