lunes, 29 de enero de 2018

EL EMPUJÓN DE SIEMPRE

El Barcelona remontó al Alavés merced a una deplorable actuación de Iglesias Villanueva que hace que los culés lleven casi tres años sin un penalti en contra

Antonio Blanca

El viernes se inició la vigésimo primera jornada de la Liga con el choque vasco entre Athletic de Bilbao y Éibar que finalizó con empate a uno que le vale a los armeros para continuar cerca de puestos de Liga Europa y sin embargo al Athletic no le saca de la zona media baja de la tabla.

El sábado Levante y Deportivo también se repartieron un punto cada uno tras su empate a dos goles, como ocurrió en la Rosaleda entre el Málaga y el Gerona que firmaron tablas con un empate a cero.

El Madrid llegaba a Mestalla lamiéndose las heridas por la vergonzosa eliminación copera del pasado miércoles. Los de Zidane jugaron sesenta minutos buenos y media hora (en la segunda parte) que estuvieron a merced de los de Marcelino. El Valencia nunca le perdió la cara al partido, pese a ir cayendo 0-2, con dos tantos de penalti anotados por Cristiano Ronaldo en la primera mitad del encuentro. El Madrid supo sufrir, y cuando entraron Lucas Vázquez y Asensio (en esta ocasión Zidane sí acertó con los cambios al quitar a un cansado Benzema y un mediocre Bale) contaron los de azul turquesa con más profundidad, hecho que propició el definitivo 1-4, sumando dos jornadas consecutivas de goleadas y revertiendo poco a poco la mala situación en la que el Real Madrid se halla inmerso.

El Villarreal venció 4-2 a la Real Sociedad en un buen partido de los castellonenses para no perder la estela del cuarto en discordia, el Madrid, y de paso distanciarse del Sevilla, que ahora es sexto. Los donostiarras con esta derrota empiezan a asomarse al descenso, y el puesto de Eusebio se tambalea por primera vez desde que se hiciera cargo del equipo vasco.

El Barcelona sufrió ante el Alavés, que mantuvo el tipo en el Camp Nou durante setenta minutos pero terminó por claudicar ante el arreón final azulgrana, que no aflojan en la carrera por el liderato de La Liga Santander y al que solo le amenaza, de lejos, el Atlético Madrid, que se reencontró con el triunfo en el choque ante el Las Palmas.

La sesión fue propicia una vez más para el cuadro de Ernesto Valverde. Jornada a jornada sus perseguidores caen uno tras otro. Solo el Barcelona prolonga partido a partido una estabilidad y una inercia ganadora que le mantiene al alza.

El Atlético se recuperó del traspié que tuvo el pasado fin de semana. Está a once puntos. El Valencia, que pretendía formar parte de la pelea y discutir, al menos, la segunda plaza al combinado rojiblanco, ya está más pendiente de resguardar el tercer lugar, al que se aproxima el Real Madrid. El equipo de Marcelino García está a seis del Atleti y a trece del Barcelona.

El cuadro de Ernesto Valverde padeció más de lo esperado ante el Alavés, que ya dio la campanada en el Camp Nou el pasado año. Con ese talante se plantó también en esta ocasión. Incluso vio cerca el objetivo de puntuar al tomar ventaja en el marcador con el gol del sueco John Guidetti en el primer tiempo. El líder no pudo cambiar el sino del partido hasta la aparición en escena del colegiado que volvió a favorecer sin ningún tipo de miramientos los intereses blaugranas. Los dos goles (Luis Suárez y Messi) no debieron subir al marcador, y a los vitorianos se le hurtó un penalti por mano clara de Umtiti. Errores que llevaron al Alavés a salir derrotado finalmente y al cuadro de Valverde a sumar la sexta victoria consecutiva.

El Atlético Madrid reforzó la segunda plaza con un triunfo firme ante el Las Palmas, que no termina de salir del pozo. Fue al contraataque como el cuadro de Diego Pablo Simeone se reencontró con el triunfo después de los tres contratiempos consecutivos sufridos en las últimas fechas. El empate contra el Girona la semana pasada y el doble revés sufrido contra el Sevilla que le echó de la Copa. Fue en la última media hora como el cuadro rojiblanco solventó su compromiso. Tantos de Antoine Griezmann, Fernando Torres y Thomas Partey, que echaron por tierra la resistencia isleña, que solo mantuvo el tipo durante una hora.

Fue una victoria esencial para el Atlético, que reafirma sus expectativas y que le asienta en el segundo puesto, beneficiado por la derrota ante el Real Madrid del Valencia, al que supera ya en seis puntos y a la espera de algún tropiezo del Barcelona para aferrarse a cualquier atisbo de opción hacia el liderato del torneo.

El conjunto rojiblanco está instalado en un objetivo lejano este año para el Sevilla, distanciado aún más de los puestos de Liga de Campeones después de que el Getafe le arrebatara dos puntos en el Sánchez Pizjuán en el tiempo añadido. El equipo madrileño arrancó un empate en la prolongación del partido, con tanto de Ángel Rodríguez, y dejó helado al bloque sevillista, que se veía con los tres puntos después del gol marcado por el colombiano Luis Muriel cuando revolucionó el juego de los suyos en la segunda mitad. El paso al frente en la Copa del Rey y la victoria en Cornellá ante el Espanyol avistaban una recuperación que fue incapaz de rubricar el plantel de Vincenzo Montella con el Getafe. Sin un juego brillante tuvo más ocasiones que el rival. Pero el tanto de Ángel afeó su hoja de servicios en la jornada.

El Leganés, sin embargo, sí prolongó la dinámica copera. Supo cambiar de registro. Aparcar la euforia de la Copa y trasladar a la Liga sus buenas sensaciones. Demostró el conjunto pepinero que no vive solo de un día de gloria y ante el Espanyol exhibió oficio para sacar los tres puntos, desplazar de la tabla al conjunto catalán y asentarse en una zona cómoda. El partido redondeó una semana para el recuerdo. Completó su clasificación para las semifinales de la Copa del Rey después de eliminar al Real Madrid con un triunfo en el Santiago Bernabéu con una importante victoria liguera. Asier Garitano rotó con pocos miembros en su once de la heroicidad copera. Sin embargo, aunque cambiaron las piezas no se modificaron ni la actitud ni el planteamiento conscientes los jugadores de que no aprovechar sus oportunidades supone dejarle el lugar a otro. El infortunio de Borja Hermoso, que marcó tres goles aunque dos en su propia portería, lastró al Espanyol, siempre por debajo en el marcador. El primer autogol del zaguero visitante fue a los diez minutos aunque Marc Navarro empató al inicio de la segunda mitad. Miguel Guerrero volvió a adelantar al Leganés a la hora de juego. El partido quedó sentenciado con otro tanto en su meta de Hermoso, que anotó también el segundo del Espanyol, pero a solo dos minutos del cierre.