lunes, 13 de junio de 2016

EN BUSCA DE LA CORONA EUROPEA

Desde el pasado viernes Francia alberga la disputa de la Eurocopa 2016, que por primera vez es disputada por 24 equipos y en la que España espera reeditar los triunfos de 2008 y 2012

Antonio Blanca

Cada cuatro años esperamos con ansia el momento de ver a los mejores jugadores europeos en acción. Sus países afrontan con ilusión el inicio de la competición soñando con ser Campeones de Europa. Por primera vez, son 24 las aficiones que llegan con ganas de hacer historia.

Y es que la Eurocopa de Francia 2016 será muy especial para todos. El hecho de tener más participantes que nunca ha provocado que muchos países se estén volcando claramente en el torneo. Cuando escuchas hablar a los distintos seleccionadores, muy pocos se descartan para dar la sorpresa. Aquí nadie regalará nada.

Sobre todo porque, tras lo visto en la fase de clasificación meses atrás, no hay ninguna selección que pueda colgarse el cartel de favorita absoluta e ir partido tras partido mirando por encima a los demás. Si bien hay equipos más fuertes que otros, el fútbol actual en el que el físico es muy importante, y la gran calidad de los entrenadores han convertidos a sus equipos en conjuntos muy equilibrados y muy bien trabajados, por lo que las sorpresas están prácticamente garantizadas.

Y no estamos locos. Todos sabemos que Francia, Alemania, España, Inglaterra e Italia son las que más nombre tienen, y que junto con Bélgica, Portugal y Croacia son las grandes favoritas. Pero equipos como Austria, Polonia, Gales o Islandia llegan con la tranquilidad de haber cumplido al clasificarse y con unos sueños y una afición que les van a dar alas en cada partido.

Ciertamente, exceptuando Hungría y quizás Albania, todas las demás deberán ser tenidas en cuenta. Todas. El que de por sentado que ganar a Rumanía, República Checa, Irlanda del Norte, Islandia o Eslovaquia va a ser fácil, seguramente acabe haciendo las maletas antes que ellas.

De momento los sueños se mantienen intactos en 24 países. Unos quieren confirmar su buen momento; otros llenar de esperanza a equipos que llevan tiempo sin jugar al máximo nivel; algunos quieren hacer disfrutar a su país y hay otros que quieren dejar de lado malas experiencias pasadas. Todos tienen un objetivo y todos tienen un motivo para pelear. En Francia nadie regalará nada. Todos quieren reinar en el viejo continente.