Victoria
de los colchoneros el domingo para seguir la estela del líder, el Barcelona que
venció en Ipurúa con polémica arbitral
Antonio Blanca
La
jornada vigésimo cuarta empezó el viernes en Gerona con la goleada del cuadro
local sobre el Leganés. Los catalanes con la suma de tres puntos miran ya un
posible sueño europeo al que de momento tienen a cuatro puntos. El Leganés por
su parte queda en la zona media baja de
la clasificación.
El
sábado a mediodía el Sevilla venció a domicilio en Las Palmas por 1-2, el día
que se despedía de la isla Jonathan Viera. El Barcelona sudó en demasía en
Ipurúa para ganar con empujoncito arbitral al Éibar por 0-2. Posteriormente el
Alavés venció 1-0 al Deportivo de Seedorf que en dos choques suma dos derrotas.
Los vitorianos empiezan a mirar de lejos el descenso, sin embargo el cuadro
gallego sigue hundiéndose. El final del sábado se puso en La Rosaleda, donde el
Málaga cayó por 1-2 ante el Valencia saliendo claramente perjudicado por el
árbitro. Esta vez al Valencia le vino bien llorar de los arbitrajes pues salió beneficiado.
El
Atlético de Madrid persiste en su intención de pelearle la Liga al Barcelona y
con su victoria frente al Athletic por 2-0 continúa a siete puntos, en tanto
que el Real Madrid cerró una buena semana con una remontada en Sevilla ante el
Betis (3-5), lo que le mantiene en la lucha por el tercer puesto.
El
conjunto del argentino Diego Pablo Simeone sumó su cuarta victoria consecutiva (todas
sin encajar gol alguno) ante un rival muy conservador que resistió algo más de
una hora. Pero un tanto al contragolpe del francés Kevin Gameiro a centro de su
compatriota Antoine Griezmann, acabó con la resistencia y el planteamiento
defensivo del cuadro vasco, que no pudo contar con dos de sus grandes puntales,
Aritz Aduriz y Raúl García. El hispano-brasileño Diego Costa puso, a diez
minutos del final, el broche al triunfo del conjunto atlético, que deberá
confirmar su sólida marcha en el Ramón Sánchez Pizjuán ante el Sevilla y en el
Wanda Metropolitano frente al Leganés antes de visitar el Camp Nou el próximo 4
de marzo en un partido que podría ser clave.
Cinco
días después de dar una alegría a su afición ante el París Saint Germain, el
Real Madrid se enfundó de nuevo la camiseta de la Liga y por momentos dio la
sensación de que iba a volver a las andadas. En esta ocasión tuvo el acierto
para remontar y acabar la semana con una sonrisa y con su tercer triunfo
seguido tras haber anotado doce tantos. El triunfo le mantiene a un punto del
Valencia, al que podría adelantar el miércoles cuando dispute en Butarque el partido
aplazado ante el Leganés por su participación en el Mundial de Clubes de
Emiratos Árabes. Además ya tiene al quinto, el Sevilla, a seis puntos. Zinedine
Zidane introdujo varios cambios en el once inicial (dejó fuera a Karim Benzema,
Raphael Varane, Isco Alarcón y Luka Modric, al margen del lesionado Toni Kroos)
y esta vez sí sobrevivió en un encuentro loco con ocho goles. Se adelantó
pronto por medio de Marco Asensio. Luego, el Real Madrid careció de la más
mínima presión al rival, dio la sensación de dejadez, entregó el balón al Betis
y este, tras inquietar varias veces a Keylor Navas, lo aprovechó para remontar
con dos tantos seguidos, obra del franco-argelino Mandi y de Nacho en propia puerta.
Además, Zidane perdió por lesión al brasileño Marcelo y todas las miradas se
ponen en cuanto estará en el dique seco, porque el 6 de marzo el Madrid se
juega la temporada en París. No se rindió el cuadro madrileño porque el Betis
también es un equipo propicio para jugar con alegría, demasiada por momentos, y
el choque fue una sucesión de llegadas a ambas porterías. Sergio Ramos al
comienzo de la segunda mitad, de cabeza a la salida de un córner, devolvió las
tablas, Marco Asensio, tras una gran jugada de Dani Carvajal rompiendo hasta a
tres rivales, y Cristiano Ronaldo con un cañonazo firmaron la remontada. El
Betis mantuvo el pulso en plena locura y soñó con algún punto cuando Sergio
León elevó el 3-4 a cinco minutos del final, pero en la prolongación Benzema,
que había reemplazado a Cristiano Ronaldo, cerró el choque.
No
pudo ganar Villarreal, que con el triunfo del Sevilla el sábado en Las Palmas
(1-2) y su empate en Barcelona frente al Espanyol (1-1) queda sexto a siete
puntos del Real Madrid y a uno del Sevilla, y con tan solo dos de margen
respecto al Éibar.
El
cuadro de Javi Calleja acumuló su cuarto encuentro sin ganar -tres de Liga y
otro de Liga Europa. También se adelantó en el primer periodo con gol de
Rodrigo Hernández, que se estrenó en Primera división. El Espanyol, que acumula
tres derrotas y tres empates, salvó un punto en el tramo final gracias a un
exquisito lanzamiento de falta de Esteban Granero e incluso en la prolongación
tuvo tres grandes ocasiones seguidas en una misma jugada.
La
Real Sociedad alivió sus penas y agravó la situación del Levante, al que venció
por 3-0 en un magnífico encuentro de Sergio Canales. La crisis guipuzcoana
queda aparcada de momento. Xabi Prieto abrió de penalti muy pronto el marcador.
Se lesionó en el lanzamiento y fue sustituido por Canales, quien aprovechó la
ocasión para asistir a Juanmi Jiménez en el segundo gol y para sentenciar con
un bonito gol. La Real Sociedad vuelve a la mitad de la tabla pero sobre todo
se reconcilia consigo mismo y su afición, en tanto que el Levante queda
decimoséptimo con tan solo dos puntos de margen respecto al descenso que marca
Las Palmas.
La
vigésima cuarta jornada se cerrará este lunes en el Coliseum Alfonso Pérez,
donde se medirán el Getafe y el Celta, undécimo y décimo.