Aunque
todavía le falta el premio del gol con el Real Madrid en este nuevo curso, el
malagueño ya ha saboreado estas mieles con España. Frente a Croacia, flamante
subcampeona del Mundial de Rusia, Isco Alarcón fue uno de los goleadores del
encuentro celebrado en Elche, anotando un tanto prodigioso, demostrando así que
paso a paso va recuperando su mejor nivel.
Durante
este primer parón por los compromisos internacionales, el mediapunta ha vuelto
a ser uno de los líderes de la nueva selección de Luis Enrique. El nombramiento
del técnico asturiano fue muy discutido por su sabido sentimiento
antimadridista, pero parece que este no nubla su criterio ya que convocó hasta
a seis futbolistas blancos y, además, todos ellos fueron titulares en el
segundo encuentro de la UEFA Nations
League.
La
selección española se convirtió en una vía de escape para el futbolista desde
aquellos tiempos en los que el protagonismo se le negaba en la casa blanca.
Isco vivió durante algunas temporadas a la sombra de la BBC, pero las lesiones
de Bale le abrieron una puerta al once que el jugador andaluz no desaprovechó,
convenciendo así a Zidane, quien no dudó en apostar por él en las dos últimas
finales de la Champions League.
Esta
confianza del entrenador francés también se vio traducida en el combinado
nacional, donde el por aquel entonces seleccionador español dio la batuta a
Isco. Durante aquella etapa, Julen Lopetegui no dudó en reiterar una y otra vez
que el futbolista malagueño necesitaba más continuidad para mostrar su nivel
más top y esto no ha quedado en palabras, sino que ha dotado en estos primeros
compases del curso al jugador de esa estabilidad para llegar al cien por cien.
Con
jugadores como Gareth Bale o Benzema en un estado de forma sobresaliente, el
paso al frente del malagueño puede suponer ver a un todavía mejor Real Madrid.
Isco es un futbolista diferente, capaz de romper las líneas rivales con una
genialidad técnica o un pase imposible que desbarate las férreas defensas de los
adversarios. Aunque ha iniciado bien la campaña, tampoco ha sido de los más
destacados en el conjunto merengue, por lo que de llegar a este estado óptimo
se puede presumir que ver al Madrid de Lopetegui puede ser una auténtica
delicia.
Ahora,
con el regreso de la Liga y el debut en la máxima competición continental la
próxima semana frente a la Roma, el andaluz debe demostrar que ha recuperado su
mejor nivel. La competencia por un puesto en el once inicial se vuelve feroz,
ya que Modric había venido siendo suplente en algunos encuentros de este principio
de temporada al haber sido el último en incorporarse al trabajo tras el
Mundial.
Con
el centrocampista croata de vuelta, las rotaciones de Julen Lopetegui serán una
constante y varios jugadores pelearán por ocupar ese hueco libre que hay en el
equipo de gala del técnico vasco. Isco competirá así con jugadores como
Asensio, que también ha venido siendo de la partida en estos primeros duelos de
la 2018/2019. Mientras que otros como Lucas Vázquez o Ceballos 'pelean' por
convertirse en el jugador número doce del Real Madrid.