Aránzazu Gálvez
La selección alemana se exhibió (4-0) ante
Portugal en el debut de ambos en el Mundial de Brasil, partido
correspondiente al grupo G y en el que los teutones 'arrasaron' a su
rival con Thomas Müller, autor de un 'hat-trick', como máximo
protagonista de un choque en el que Hummels, Coentrao y Hugo Almeida se
retiraron lesionados.
Había mucha expectación en torno al encuentro de las dos máximas
favoritas del grupo, pero los alemanes lo destrozaron en apenas 45
minutos. El equipo de Joachim Loew fue tomando el control del partido
poco a poco a través del dominio del balón. El técnico de la
'Mannschaft' juntó sobre en el centro del campo a Lahm, Götze, Özil y
Kross, con Müller de falso nueve. Y la superioridad fue aplastante.
En cuanto el partido perdió la efervescencia inicial -diez minutos
con ataques en ambos lados- los alemanes se adueñaron del balón y los
goles cayeron por pura inercia. El primero llegó de penalti y fue obra
de Müller. La pena máxima se la hizo Pereira a Götze tras una gran
jugada en la zona de los tres cuartos de campo que dejó al del Bayern
solo en el área alemana.
Los dos siguientes tantos fueron reminiscencia pura. Alemania ha
decidido ganar jugando al fútbol, pero, de vez en cuando, recuerda al
mundo que siguen siendo alemanes. El segundo llegó de córner. Como
tantas veces en la historia, un alemán cabeceó un saque de esquina con
la potencia de un 'panzer'. El 'ejecutor' fue Hummels; el asistente, un
Tony Kroos al que cada vez le sienta mejor el traje de director de
orquesta.
El centrocampista del Bayern de Múnich asistió también en el
tercero. Un tanto de nuevo simple, alemán. Kroos mandó un balón al área,
Alves falló en el despeje y Müller la enganchó a la red. No acabó ahí
la producción alemana, ni la del '13' de los germanos.
En la segunda parte, insustancial en cuanto al resultado, Müller
haría el tercero de su cuenta particular al cazar en boca de gol un
balón suelto que dejó Rui Patricio tras un pase atrás de Andre Schurrle.
En la génesis de la acción estuvo de nuevo Kroos, que inicio la jugada
con una gran apertura de juego al jugador del Chelsea.
El partido dejó muy tocada a Portugal. No solo perdió sino que no
compitió como se esperaba. Además, Pepe no podrá jugar mínimo el segundo
partido al entender el colegiado del encuentro, el serbio Mirolad
Mazic, que agredió a Thomas Müller en un lance del partido. La acción
consistió en un forcejeo en el que el brazo de Pepe acabó en la cara de
Müller. Éste exageró la caída y Pepe se encaró a él juntando cabeza con
cabeza.
Pepe fue la mala noticia extradeportiva para Portugal, las
deportivas fueron las lesiones de Hugo Almeida y Fabio Coentrao y el
encuentro discreto de Cristiano Ronaldo. El capitán de la selección lusa
se fue difuminando conforme su equipo encajó goles. Se mostró bien
físicamente, pero solo creó algo de peligro en los primeros diez
minutos, con un disparo desde dentro del área que obligó a Neuer a hacer
una de las pocas paradas del día.
Correctivo alemán en el primer partido del grupo. Los de Löw dejan
encaminado el liderato del grupo y, de paso, meten presión a una
selección portuguesa que ya no podrá fallar en los dos encuentros que le
restan, ante Estados Unidos y Ghana, si quieren estar en los octavos de
final del Mundial.