Arbeloa es un amigo, no es sólo un jugador para mí. ¿Por qué
razón un jugador se transforma en un amigo? Por ser un ejemplo de pasión por su
profesión, de amor por su club, de dedicación a un grupo de trabajo y a sus
objetivos, de la humildad y el honor en la relación con todos los que trabajan
con él día a día.
En la historia de nuestro gigantesco club pasarán muchos de
los mejores jugadores del mundo. Arbeloa no tiene ese perfil tan alto, pero es
seguramente uno de los que ha dado al Real Madrid, a sus aficionados, a todos
sus entrenadores y a todos sus compañeros todo lo que tenía y lo que no tenía.
Yo para Arbeloa sólo tengo palabras de agradecimiento. En
mis 16 años de entrenador lo tengo, seguramente, en el podium de los jugadores más
importantes con los que he trabajado. Un buen jugador y un hombre excepcional.